Nuestro país no está bien. No sólo la incapacidad, improvisación e irresponsabilidad han marcado al gobierno federal de Morena, sino también la indiferencia e insensibilidad frente a las demandas sociales.
Cientos de mexicanos fallecen todos los días sin que exista una respuesta gubernamental para remediar esa tragedia. Han hecho todo lo inimaginable para hacer que pandemia sea destino y lo están logrando.
Y eso mismo pasa con la inseguridad, desempleo, decrecimiento, violencia contra las mujeres, corrupción, desinversión, inexistencia de vacunas y medicamentos y deterioro ambiental. Ninguno de estos graves problemas es atendido y mucho menos solucionado.
Justamente por esas necesidades sociales es que la militancia del Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha decidido realizar amplias alianzas con diversos partidos políticos con los que nos identifica el catastrófico diagnóstico sobre el estado en el que se encuentra México y la amenaza que significa que el Poder Legislativo Federal siga secuestrado por una sola voluntad.
Mientras las y los mexicanos enfrentan la carestía, el desempleo y la enfermedad, el bloque mayoritario en el Poder Legislativo Federal se da el lujo de legislar sobre temas que no solo no resuelven los graves problemas nacionales, sino que crea más, como es el caso de la innegable invasión a la autonomía del Banco de México y el riesgo de que sea utilizado para realizar operaciones de lavado de dinero.
No Morena, ésas no son las reformas por las que el pueblo te dio su confianza y su apoyo.
Por ello, es urgente que el sistema político mexicano recobre el sistema de frenos y contrapesos que evite la concentración del poder público y detenga el desmantelamiento sistemático de instituciones públicas.
Los partidos Acción Nacional, de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional, en una auténtica Unidad Democrática, estamos en desacuerdo que la nación desconozca el destino de miles de millones de pesos que han sido recortados al erario, cancelando servicios fundamentales y la observancia de derechos humanos.
Las alianzas PAN-PRI-PRD no son objeto del capricho ni de intereses particulares, sino de un genuino esfuerzo por salvar a la población mexicana del cruento destino que Morena está delineando para todas y todos. Nosotros le apostamos al diálogo, al acuerdo y a la competencia democrática; los que le apuestan al miedo, a la división y al chantaje son los que inundaron Tabasco.
“Como anillo al dedo” han dicho que utilizarán las tragedias sanitaria, de seguridad y económica, ¿por qué?, ¿qué pretenden?, ¿cuántas vidas más?, ¿cuántas tragedias son suficientes?
No permitas que la cerrazón y la indiferencia sigan causando la muerte de más mexicanos.
Nuestra unidad se encuentra sustentada sobre la base de la pluralidad de convicciones, de visiones y de propuestas, armonizadas por el respeto a la democracia y al estado de derecho.
La Unidad Democrática es para ti, para ofrecer un mejor presente y futuro a tu familia y no caer en el precipicio que Morena está cavando.
No hay popularidad que valga cuando la acción de gobierno es catastrófica e irresponsable.
La Unidad Democrática es conciliación, acuerdo y futuro.
Alejandro Moreno, Presidente Nacional del PRI