El uso de procesos tecnológicos en los negocios inmobiliarios aumentó más del 100% en lo que va de este año comparado con el mismo periodo del 2020, esto se debe y es gracias a la pandemia de Covid-19 que trajo consigo nuevas necesidades, un ejemplo es el de reducir el contacto con objetos y personas, de esta manera se pudieron realizar compraventas y arrendamientos sin el riesgo de contagios y con la mayor certeza en la transacción o acuerdo.

Es sumamente imperativo recalcar que los contratos digitales para el sector inmobiliario son totalmente legales en México, esto es porque la creación del consentimiento puede darse a través de medios electrónicos.

Los acuerdos o contratos digitales minimizan costos en ambas partes de la operación, ya que no habrá necesidad de traslados y también se usa mucho menos materia prima. Las impresiones no sólo usan mucho papel, sino que también generan un costo de almacenaje físico, mientras que los otros se guardan en la nube.

Más y más tecnología

Este boom de la digitalización se vio en el auge del llamado ecomerce, de los servicios de streaming y en los de entrega a domicilio. principalmente permeó todo y con el sector inmobiliarios sucedió lo mismo, pues, también se presentó en los créditos hipotecarios.

La crisis de la pandemia hizo que sacar un crédito hipotecario para comprar una vivienda tuviera intereses muy bajos y también facilitó los procesos. Ahora se puede obtener un crédito hipotecario desde un dispositivo electrónico, sin desplazarse y con procesos más ágiles que antes.

Tercera ola Covid-19 y bienes raíces

El impacto que ha tenido la pandemia en nuestra vida cotidiana y en nuestra economía es notorio. Sectores como el de bienes raíces, son un ejemplo, tienen que adaptarse rápidamente, debido a que la población ha transformado sus exigencias. Un fenómeno que ha incidido en este mercado, por ejemplo, son los nómadas digitales.

Ante la pandemia de Covid-19 que exige el trabajo o estudio en casa, las personas comparten espacios laborales o vivienda que les permiten una conexión a internet estable, pero también la reducción de gastos de renta. Hay una necesidad de “networking”, es decir, que las y los profesionales y emprendedores necesitan reunirse o mantenerse en contacto para construir relaciones y desarrollar oportunidades de negocio.

Por ello, más personas extranjeras, turistas y visitantes, eligen a nuestro país entre los destinos favoritos para descansar y trabajar a distancia. Pero las y los mexicanos viven una realidad distinta.

Con pleno conocimiento de esta realidad, el mercado inmobiliario debe reinventarse. Adaptar los espacios de acuerdo a las necesidades actuales y publicitarse con precios competitivos.