Más allá de las filias partidistas de los legisladores locales, existe una fracción que antes que su militancia, pone sus intereses políticos y sus proyectos electorales futuros, sin importar que su actuar raye en los terrenos de la incongruencia y el absurdo.

¿Recuerda usted a esos regidores que no hace mucho defendían el cobro del DAP en Puebla capital y que tras la llegada de Eduardo Rivera al Charlie Hall cambiaron su postura?

Basta con hacer un repaso a sus acciones para confirmar que la congruencia no es una de sus características; y eso quedó demostrado en la votación de la madrugada del 24 de diciembre cuando en una audaz maroma decidieron que había poblanos de primera y otros, de segunda.

Me explico.

Aunque las leyes deben ser de observancia general, para cumplir con un principio de justicia, al final los diputados entendieron que cobrar el Derecho al Alumbrado Público (DAP) sería una marca que difícilmente se podrían quitar.

Preocupados más por su propio proyecto y hasta para cobrar venganzas políticas, las y los diputados decidieron que cambiar el discurso era un asunto menor, aunque con ello terminaran por cargarle la mano a los poblanos del interior del estado y perdonar a los de la capital, San Pedro y San Andrés Cholula.

Al aprobar el cobro del DAP en 144 ayuntamientos fuera de la zona metropolitana, algunos de ellos realmente sumidos en la pobreza, los legisladores se ensañaron, una vez más, contra quienes menos tienen, y que mucho menos pueden protestar.

La absurda votación

Y si usted se pregunta cómo votó cada legislador le cuento que hubo cuatro que se ausentaron: Jaime Natale (PVEM), Mariano Hernández (PT), Juan Enrique Rivera (PRI) y la morenista María Yolanda Gámez.

Además de estos tibios, hubo tres que sí se mantuvieron firmes en su postura de cobrar el “derecho” con todo y el costo político que ello conlleva, los panistas Eduardo Alcántara, Karla Rodríguez y Oswaldo Jiménez.

Los 34 diputados restantes decidieron que la capital y las Cholulas no podrían cobrar el DAP, aunque sí avalaron ese mismo cobro para otros 144 municipios. Muy congruentes ¿no?

El nuevo discurso

Quienes tuvieron los votos bipolares ahora dirán que se trató de una decisión a favor del pueblo, que evitaron un nuevo “impuesto”, que la cosa no está como para cobrar más, etcétera, etcétera…

Lo que será mucho más difícil es que los morenistas, priistas, panistas y hasta los representantes de MC puedan justificar por qué unos poblanos sí tendrán que pagar el alumbrado público y otros no.

Y en esa lista anote usted a Carlos Navarro (PSI), Fernando Morales (MC), Néstor Camarillo (PRI), Isabel Merlo (PRI), Jorge Estefan (PRI), Edgar Garmendia (Morena), Adolfo Alatriste (PRI), Olga Romero (Morena), Fernando Sánchez (Morena), Eduardo Castillo (Morena), Azucena Rosas (Morena), José Antonio López (Morena), Ruth Zarate (Morena), Sergio Salomón (Morena), Mónica Silva (Morena), Arianna Hernández (Morena), Nora Merino (PT), Roberto Solís (Morena), Guadalupe Yamak (Morena), Karla Martínez (Morena), Norma Reyes (PRI), Laura Zapata (PRI) y José Miguel Huerta (PT).