Como en carrera de atletismo, ayer en la mañanera, llamó a los suspirantes a colocarse en sus marcas y alistarse para que el gobernador sacara la pistola, y diera el balazo de salida.
De esta forma, sin tapujos ayer Barbosa lanzó el mensaje que a más de un político le arrancó una nerviosa sonrisa.
Palabras más, palabras menos, dio luz verde para que quienes aspiren a sucederlo —los suspirantes—, rompan el silencio y se sacudan la modorra política.
Barbosa argumentó que se trata de generar un piso parejo. Actualmente sólo dos han mostrado sus cartas lo que, a su decir, reduciría las oportunidades de quienes han preferido reservarse esa decisión.
Con este banderazo de salida, comenzaremos a escuchar desde preguntas como la que se le realizó a Olivia Salomón en Cholula la semana pasada cuando el propio gobernador expresó que la secretaría “habla como candidata”, hasta impresentables quienes ni en broma serán candidatos.
El anuncio también llega en un momento muy delicado para Morena. Su renovación estatal está en curso y quienes resulten electos como representación en Puebla tendrán voz y voto en la selección de candidatos de 2024, un jugoso botín.
Estoy seguro que a varios y varias, el anuncio les tomó por sorpresa, por lo adelantado de los tiempos, casi un año antes de que se definan los procesos internos y las candidaturas.
Sin embargo, considero que en menos de un mes, muy a la par de la realización de las asambleas de Morena, la lista de suspirantes comenzará a crecer hasta que parezca más un pergamino.
Uno de los riesgos de reconocer desde este momento que buscan heredar la silla de Casa Aguayo es que indudablemente, los interesados serán blanco de sus detractores.
¿Quiénes se apuntarán en esa lista?, ¿lograrán llegar con buenos números al 2024?, ¿cuántas de ellas o ellos caerán por escándalos en los próximos meses?
Veremos y diremos.
Dinamitando la alianza
Sin defender a Alejandro Moreno podemos reconocer que acciones como la de ayer, en donde con todo el aparato del estado tumbaron la puerta de la casa de “Alito” para realizar un cateo, buscan dinamitar la alianza entre el PAN, el PRI y el PRD.
Morena y en concreto, el inquilino de Palacio Nacional, saben que la única manera de retener sin complicaciones la presidencia de la República es fracturar la alianza entre los partidos de oposición.
Ni de chiste el PAN, el PRI o el PRD en lo individual podrían competirle a Morena.
Lo importante será saber si los audio escándalos semanales y las investigaciones judiciales contra el presidente nacional del PRI son tan estruendosos como para que los panistas pinten su raya y prefieran ir solos antes que arrastrar los negativos del tricolor.
