El presidente del Tribunal Superior de Justicia Héctor Sánchez, durante una gira de trabajo por Teziutlán, fue sonrojado este martes cuando una reportera le preguntó si estaría interesado en ser candidato en 2024.

La pregunta llegó como parte de la fiebre que se ha registrado tras la solicitud que realizó la semana pasada el gobernador, Miguel Barbosa, para que todos los interesados en sucederlo hagan públicas sus aspiraciones.

Como buen político, el presidente del Tribunal Superior de Justicia evadió la respuesta, por lo que nuevamente se le preguntó en búsqueda de que llegara el famoso destape.

Un destape que no llegó, pero que entre sonrisas resultó más que evidente.

Palabras más, palabras menos, Héctor Sánchez, dijo que por el momento se queda al frente del TSJ para seguir enfocando sus baterías en una justicia con proximidad.

“El que estemos trabajando no debería llamar la atención de nadie, tendría que ser normal vernos trabajando. Dejar muy claro que tengo un enorme respeto a la institución y nosotros estamos trabajando y seguiremos trabajando cada vez más, por qué, porque la proximidad es un compromiso del Poder Judicial”, dijo.

Citando al gobernador, ¿a poco no le suena a discurso de candidato?

Después develó que como parte de las acciones para acercar la justicia a todos los poblanos, los recorridos al interior del estado continuarán.

Es verdad que aún faltan 18 meses para las definiciones, pero está claro que algunos ya están en la carrera aunque aún no decidan abrir su juego.

Y aunque Héctor no se destapó, es claro que su perfil lo convierte en un aspirante con posibilidades reales de ser el verdadero caballo negro.

¿Será la vencida?

Anoche la Comisión de Transparencia del Congreso aprobó la tercera terna para seleccionar a una comisionada del ITAIPUE, ¿será esta la vencida?

Para conocer la respuesta no habrá que esperar mucho ya que el próximo viernes los diputados votarán en el Pleno cuál de las tres mujeres que llegaron a la final -Rita Elena Balderas Huesca, Laura Elizabeth García González y Norma Estela Pimentel Méndez - será la próxima comisionada.

Y aunque de las enlistadas sólo una cuenta con experiencia en el cargo, cuando el instituto de transparencia se llamaba CAIP, se ve difícil que la decisión de los legisladores responda exclusivamente a las cartas credenciales.

Sólo basta recordar que en el reciente proceso se debió repetir porque los diputados no lograron una mayoría calificada. Fue tanta la diferencia entre los criterios políticos y académicos que la votación se fue a tercios.

Hablando de sesiones, le adelanto que la última de este periodo ordinario, programada para el viernes 15 de julio resolverá varios temas de interés social, además de la selección de comisionada de transparencia, los diputados votarán el aumento al precio de las tarifas del agua y las reformas fiscales.

¿Qué conveniente fecha verdad?