Han pasado más de tres semanas desde que 10 mineros quedaron atrapados en El Pinabete y poco o nada ha hecho el gobierno de AMLO para rescatarlos con vida.

Los familiares, con la dura realidad a cuestas, han insistido en el rescate de los desaparecidos, ya no hablan de ellos con vida, pero quieren ver sus cuerpos por última vez, tener la certeza del trágico desenlace.

Pero el gobierno de Andrés Manuel demostró una vez más su insensibilidad.

Ayer la coordinadora de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, tuvo el cinismo de ofrecerles a los familiares de los mineros que se encuentran bajo tierra comenzar con obras para rescatar los cuerpos en 11 meses.

La “oferta”, que llegó 22 días después del accidente, tiene como efectos secundarios que las obras que se pretenden realizar no están garantizadas. Las zanjas podrían inundarse y alargar el proceso de rescate o de plano tener que cancelarse.

El fantasma de Pasta de Conchos y los cuerpos de 63 mineros que no han sido rescatados desde el año 2006 se asoma a la zona de El Pinabete. Si después de 16 años y tantísimas críticas a Javier Lozano y Felipe Calderón no se ha cumplido con la promesa de López Obrador, ¿qué se puede esperar en la tragedia de este mes?

Lejos de dar tranquilidad o mostrarse empática con las familias de los 10 mineros que quedaron atrapados, Laura Velázquez también les advirtió que de no acceder a las largas obras, no podrán recibir la indemnización, la cual trascendió tasarán en 100 mil pesos, es decir que a lo mucho, el monto total de las 10 vidas le costará a la empresa un millón de pesos. La firma, no se nos olvide, ha obtenido contratos de la CFE de Bartlett por 75 millones de pesos por compra de carbón.

Y aunque la vida humana difícilmente puede tener un precio, lo cierto es que hablar de 100 mil pesos ante este accidente de trabajo en una mina que incumple con varios artículos de la Ley Federal del Trabajo es una ofensa mayúscula.

Pero en la 4T tienen otros datos y son incapaces de hacer lo que tanto le criticaron a otros presidentes.

Y a todo esto ¿alguien sabe si ya realizaron la supervisión en las minas y pozos de la zona para evitar que otra tragedia como esta se repita mientras se extrae el carbón de AMLO o están esperando que se repita la historia?

Los 15 días de suplicio

Es probable que en cualquiera de las redes sociales que usted consume o en cualquier medio de comunicación ya haya escuchado el primero de los varios spots de presidencia, con motivo del Cuarto Informe de AMLO.

Si bien la ley obliga a la rendición de cuentas, los comerciales deberían ayudarnos a conocer cómo se encuentra nuestro país en los temas torales como inseguridad, salud, economía y educación.

Informarnos de los índices en los que nos encontramos o lo que podríamos esperar para los próximos meses también sería lo deseable.

Por desgracia, con esta 4T nada es lo que se desea y en lugar de un informe nos tendremos que chutar dos largas semanas de odas al inquilino de Palacio Nacional.

Regalar dinero, perdón la entrega de apoyos sociales y las cifras alegres que difícilmente se pueden comprobar serán la constante en los anuncios que, cual campaña electoral, nos atiborrarán.

¿Sobreviviremos?

Veremos y diremos.