México como un conjunto es una novedad. Repúblicas de indios y de españoles. Provincias y virreinato. Cuando intentamos entre federalismo y centralismo se nos fue el ciento dieciocho por ciento de nuestro territorio entre cesiones, anexiones y ventas.
En esos tiempos el estado de Nuevo León buscaba emanciparse en lo que llamaría la República de la Sierra Madre. Este afán independista no le gustó a Juárez, por lo que rodeó al estado con un brazo de Tamaulipas, desde Matamoros hasta Nuevo Laredo. Años después Nuevo León les canjeó un municipio completo por una franja de 15 kilómetros para pegarse a Texas. Hoy es lugar de una de las arterias económicas del país, el puente internacional de Colombia.
El puente sobre el Río Bravo además de la peculiaridad del nombre, que lo toma por haberse fundado 500 años después de la llegada de Colón a América, tiene un detalle más desde julio de este año: un carril exclusivo para la empresa de autos eléctricos Tesla.
La secretaría de economía nuevoleonesa gestionó el acuerdo para mejorar las condiciones de trabajo binacional de la firma más importante de electromovilidad con su planta en Austin, Texas; oficinas centrales de la empresa.
El excéntrico magnate Elon Musk –que además de dueño de Tesla lleva proyectos como la colonización de Marte y la conexión del cerebro con computadoras– fue visto en Monterrey durante el fin de semana en compañía de la controversialmente popular primera dama neolonesa Mariana Rodríguez y funcionarios de economía. En la entidad norteña se encuentran las oficinas de seis proveedores de sus compañías automotrices y aeroespaciales.
Por el segundo trimestre del año Musk advertía la necesidad de construir más fábricas en un contexto de alta demanda e incertidumbre global. Entre los lugares propuestos barajeó cualquiera de los países norteamericanos. Si las especulaciones son ciertas y el gobernador Samuel García se reunió con el millonario las posibilidades de ver la fábrica instalarse se incrementan considerablemente.
Puebla está en la misma carrera por captar estas primigenias inversiones de la industria electromóvil, aunque como sabemos nos hemos amarrado como entidad al grupo Volkswagen, quizá de por vida.
Estos días la armadora –que cumplió 55 años en Puebla– pondrá en marcha la construcción de la nueva nave de pintura. Con esta acción la secretaria estatal de economía, Olivia Salomón, dio por iniciada “la electromovilidad en el estado”. Mientras, sigue la búsqueda por inversiones, como el “supplier day”, donde buscan atraer proveedores automotrices con oportunidades en el estado.
Las posibilidades de Puebla cruzan por valores complicados de añadir. Uno, electricidad limpia. La matriz energética sustentable del estado es diversificada, situación irrelevante ante incapacidad de explotarla por temas federales. Dos, logísticas competitivas. Transístmico, carretera CDMX-Veracruz y aeropuerto Hermanos Serdán, que cantan las rancheras igual de mal. Y tres, seguridad. En una de esas primero se arregla la seguridad que una de las otras.
