A inicios de los noventas el internet era una novedad que dejaba amplios espacios entre empresas y consumidores. Esta falta de presencia en el mundo del internet fue vista como una oportunidad de negocio, misma que se solucionaba mediante una rudimentaria comunicación vía faxes y copiar direcciones de internet a mano

La idea de uno de los creadores de esta empresa Zip2– si bien innovadora en su momento, poco tiene de comparación con el último anuncio de su empresa neurotecnológica: el primer implante digital en un cerebro humano.  

Neuralink, la empresa que hizo este anuncio la semana pasada, hizo pública la versión final de su chip cerebral. Esto, resumido gruesamente, es una computadora implantada directamente al sistema nervioso para estar integrada a nuestro cuerpo, para controlarlo, actuar como puente entre humano y computadora, o mejorarlo

Este implante, que es del tamaño de una moneda de cinco pesos y va por fuera del cuerpo, tiene interacción directa con las señales eléctricas de nuestro cuerpo, lo que permite plantearse resolver importantes retos

Para la empresa la primera misión es recuperar la visión, con la ventaja de que el chip cerebral genera la imagen directamente en el cerebro en el córtex visual, saltándose todo el mecanismo del ojo. El potencial para devolver la vista a los ciegos pudiera ser de proporciones bíblicas.  

Una cámara procesaría la imagen, sería transformada en señales digitales en un celular y transmitida al chip cerebral vía inalámbrica; el chip N1 funciona con bluetooth

La segunda misión es devolver la movilidad a los inválidos. Conectado directamente al sistema nervioso, el cerebro y la espina dorsal, el procesador envía señales eléctricas directamente a nuestros músculos.  

Cada movimiento de nuestro cuerpo es una complicadísima sinfonía de microseñales nerviosas que, con suficiente estudio, pueden ser descritas en un programa. Por lo que se puede comandar al cuerpo a levantarse de una silla, aunque pueda no existir conexión entre el cerebro y el resto del cuerpo por accidentes o enfermedades

Y la tercera misión es proveer comunicación a quienes por cualquier razón la conexión entre su cerebro y otras partes no es la óptima. La solución no es la más elegante, pero esto se logra a través de la conexión entre el cerebro y un teléfono celular. Sus decisiones de dar atrás, clic o abrir una notificación son impulsos eléctricos que el implante lee y transmite al celular

Neuralink ha logrado transmitir imágenes así a células oculares, coordinar los movimientos de cerdos y hacer que monos jueguen en un celular con solo su mente. Estos logros son eventos alcanzados y realidad, no obstante, alejados de pruebas humanas

La compañía del magnate Elon Musk ha solicitado permiso a la autoridad a la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) para iniciar pruebas en humanos, por lo que solo quedaría una posible aprobación para ver a los ciborgs como una realidad cotidiana, quizá en seis meses.