La sucesión en Casa Aguayo amenazaba con terminar en una cena de negros, por la presencia en Puebla de los buitres de la 4T.
Sin embargo, contra todo pronóstico, esta vez imperó la cordura en Andrés Manuel López Obrador, quien se sustrajo a la tentación de imponer al nuevo gobernador.
Sin duda, un factor determinante fue la entereza mostrada por doña Rosario Orozco, a quien no le tembló la voz para resaltar los logros de quien fue su compañero de vida y también de gobierno.
A su partida, el presidente dejó en manos de la viuda de Barbosa la sucesión de su extinto esposo.
Fueron varias las horas que dilató la negociación con quien a partir de hoy será el gobernador de Puebla.
Compromisos de continuidad en personas y proyectos sellaron el pacto de honor entre doña Rosario y Sergio Salomón Céspedes.
Con algunos ajustes que marcarán la personalidad de su nuevo gobierno, la continuidad y la lealtad al grupo barbosista será la marca del arranque de este nuevo periodo de gobierno.
En el camino, se quedarán marginados personajes que en estas horas fueron traicionados por la ambición, entre ellos Ana Lucía Hill y Gabriel Biestro.
Otros ajustes se sumarán al nuevo gabinete, aunque serán más las ratificaciones.
Fortalecidos saldrán Julio Huerta quien seguramente será el próximo titular de gobernación y algunos de los que operaban desde hace meses la estructura electoral para el ahora gobernador, quien velaba armas rumbo al 2024.
Interesante será conocer los pocos pero representativos ajustes que sufra el gabinete, sobre todo en las posiciones de alta responsabilidad, como Finanzas, Infraestructura, Bienestar y Educación.
De inicio, será difícil ver un golpe fuerte de timón, pero nadie quiere ser gobernador de dos años sin realmente gobernar.
El ajuste real llegará más pronto que tarde, aunque de momento, el barbosismo parece gozar de eventual salud.
Sin embargo, la gran tarea de Sergio Salomon será —y él lo sabe perfectamente— la reconciliación con todos los poblanos.
Es un tema de urgente atención y cuya tarea parece ser un traje a la medida de un personaje como Sergio Salomon.
Si una encomienda tiene el nuevo gobernador es justamente esa, la reconciliación de todos los poblanos.
¿Lo logrará? Veremos y diremos.