El desayuno entre los empresarios y el gobernador se convirtió en el parteaguas de las relaciones entre ambas partes. En esta nueva era, los hombres de negocios arribaron a Casa Puebla con un ánimo muy participativo que contrastó con la apatía y el distanciamiento de los últimos años.
Los convidados al encuentro organizado por Pepe Chedraui demostraron que estaban ávidos de un apapacho y lo obtuvieron.
Ayer el gobernador les dijo exactamente lo que querían escuchar, en respuesta, se dejaron querer y dejaron atrás la rispidez que vivieron en los últimos meses con el Ejecutivo.
Esta vez, los empresarios no iban a escuchar o conseguir promesas, tampoco a pedir contratos ni favores, simplemente querían sentir el calorcito del gobierno.
Y eso fue exactamente lo que obtuvieron.
Tanto así que las respuestas de las entrevistas -al salir del desayuno en Casa Puebla- de personajes como el presidente del CCE, Ignacio Rodríguez, fueron en el sentido de confianza: “Yo creo que con él vamos a tener todas esas oportunidades y compromisos para seguir trabajando”.
La nueva relación entre el poder y los empresarios augura buenos vientos para el estado, permite dar certidumbre a futuras inversiones en Puebla y a mantener los empleos que se generan.
Estas acciones son sumamente necesarias en tiempos como estos, donde el gobierno federal se niega a reconocer el daño que está ocasionando la inflación en los bolsillos de los mexicanos.
Nuevos aires se respiran en el sector empresarial de Puebla.
Periódicos en los Ceresos
La presidenta del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Blanca Lilia Ibarra Cadena, realizó una propuesta a diputados para empoderar a las mujeres que se encuentran en reclusión: el acceso de ellas a periódicos y otros medios de comunicación.
El acceso a la información, subrayó, permite a las presas construir o desarrollar conocimientos, habilidades o capacidades para su reinserción en la sociedad y justamente por ello, pidió que se garantice a las mujeres en reclusión allegarse de datos imparciales y certeros que les preparen para tomar las mejores decisiones cuando recobren su libertad.
Acciones como las que realiza la Defensoría Pública Federal, los concursos nacionales de redacción para mujeres privadas de su libertad y hasta historias de éxito de quienes salieron de prisión, permitirán, sin duda, empoderar y dar nuevos bríos a quienes esperan o purgan una sentencia.
La información es poder y en este caso, la frase aplica.