A días de que se realicen las elecciones en el Estado de México, el metro de la Ciudad de México y Claudia Sheinbaum podrían convertirse en el Talón de Aquiles de Morena.

Todos los días miles o quizá millones de habitantes de los municipios conurbados a la Ciudad de México se desplazan entre ambas entidades para ir a la escuela, asistir al trabajo o simplemente por recreación.

La línea 3 del Metro de la Ciudad de México que recorre de Indios Verdes a Ciudad Universitaria es una de las arterias por las que esos miles de mexiquenses se trasladan diariamente.

El abandono y la falta de mantenimiento que la Jefa de Gobierno ha permitido en el sistema de transporte colectivo generó que ayer un nuevo cortocircuito obligara a suspender las actividades en la línea 3.

Además del susto y el humo, los usuarios que estaban en los vagones cuando se suscitó el percance en la estación División del Norte, tuvieron que ser desalojados por las vías del tren, claro después de retirar la energía que corre por ellas.

Nuevamente el caos. Retrasos de dos o tres horas para llegar a los muy lejanos destinos que tienen quienes viven en el “estado vecino”.

Y es justamente ese enojo, el de los mexiquenses que se quedaron varados o tuvieron que gastar en un Uber para llegar a sus casas, el que los hará votar en contra de Morena, el primer domingo de junio.

En una contienda tan importante y tan cerrada -aunque lo nieguen en el lopezobradorismo- errores como estos pesan y mucho.

Imagine usted que cada una de las miles de personas que ayer vieron trastocados sus recorridos contagiarán al menos a cuatro de sus familiares con el enojo, la ira y hasta la preocupación que vivieron hoy.

¿Con amigas como Sheinbaum, para qué quiere Delfina enemigas?

Le cierran el camino a Nachito

Al grito de “No queremos más Nachos”, pobladores de Tecamachalco cerraron la carretera Tecamachalco–Cañada, en protesta por la falta de obras y agua en el municipio.

Nacho exigimos agua, no mientas”, fue otra de las consignas que se leyeron en las mantas que cerraban el camino.

La protesta de los habitantes de la comunidad de Lomas de Romero es una pequeña muestra de la inconformidad que hay en el municipio del morenista y tierra de los Mier.

El reclamo es justo: a la mitad de su gobierno, Nachito Mier no ha sido capaz de cumplir con su palabra.

¿Aún así se atreverá a pedir nuevamente el voto?

Veremos y diremos.