En la comida de cumpleaños del presidente estatal del PRI, Néstor Camarillo, un hecho marcó políticamente la tarde. Fue la charla de no menos de 20 minutos que sostuvieron el líder nacional del PRI, Alito Moreno y el alcalde, Eduardo Rivera.
En la mesa principal, flanqueado entre el festejado y Blanca Alcalá, Alito explicaba aparentes escenarios sobre una servilleta de papel, mientras Lalo asentaba y sonreía a las ponencias del mandamás tricolor.
Cuando al pedazo de papel no le quedaba un solo espacio, el campechano dio la vuelta y siguió anotando su aparente acuerdo con el más adelantado de los aspirantes a la gubernatura.
¿Qué hablaron? ¿Qué acordaron? ¿Sólo ellos lo saben?
Al final de la plática y aprovechando la pausa del mariachi, una pregunta provocó las risas de la mesa: ¿Cuánto por la servilleta?
Al instante la servilleta fue hecha bolita por Alito Moreno y con una sonrisa reveladora, la guardó en uno de sus bolsillos.
Quizá en ese pedazo de papel esté escrito un pacto que confirme alianzas y hasta el destino de Puebla.
Sólo quizá.
Los nuevos tiempos del Frente
Lo que en otros tiempos era impensable, hoy es una realidad, ver convivir a panistas y priistas, en una clara muestra de que el objetivo que los mueve es mantenerse unidos de cara al 24.
En la citada comida de Néstor Camarillo, en la mesa principal compartieron además de los citados Alito Moreno y Eduardo Rivera, personajes de la política local y federal: Jorge Estefan, Blanca Alcalá, Humberto Aguilar, Mario Riestra, Pepe Chedraui, Lucero Saldaña y Delfina Pozos, acompañados también por diputados federales de otros estados.
Vivimos nuevos momentos y sólo el tiempo nos dirá si esa unidad se mantiene después de que se definan las candidaturas del llamado Frente Amplio.
Veremos y diremos.
Estafeta lleva mano en Puebla
El viernes pasado se realizó un vuelo muy particular. Al Aeropuerto Internacional Hermanos Serdán llegó el primer viaje de carga de Estafeta.
La empresa trasnacional, especializada en envíos, distribuirá su carga de 40 mil toneladas de mercancía anuales entre los Aeropuertos Internacional Felipe Ángeles (AIFA) y el de Puebla.
A inicios del año, el 16 de febrero, comenté en este mismo espacio la enorme oportunidad que para las empresas y los poblanos representaría utilizar el Hermanos Serdán como un aeropuerto de carga.
El aeropuerto de Huejotzingo tiene todo el potencial de convertirse en un punto neurálgico, para el transporte de carga de vuelos que procedan, incluso de Europa o Sudamérica.
El Hermanos Serdán podría ser el gran ganador -con las voluntades necesarias- ante el caos y las complicaciones logísticas que hoy padecen las cadenas de carga y envíos internacionales, por las nuevas reglas para el AICM y el AIFA.
Mañana ahondaremos en más detalles sobre esta importante decisión.