Este martes, cerca de 200 pobladores de la comunidad de San Pedro Tlalcuapan, en Chiautempan, marcharon por las principales calles y avenidas de la capital de Tlaxcala para exigir justicia y la liberación de su presidente, Saúl Rosales, señalado por su presunta participación en el linchamiento de una persona el pasado 15 de abril.
Con gritos de “Libertad a los presos políticos y cárcel para los verdaderos criminales”, también se encontraban durante la marcha habitantes de Ixcotla, quienes aprovecharon para exigir la destitución del presidente municipal de Chiautempan, Gustavo Jiménez Romero, ante la falta de justicia para las comunidades indígenas.
Detallaron que desde hace más de 500 años son olvidadas y discriminadas, enfrentándose continuamente con el robo a casas habitación, secuestros y tala clandestina de sus zonas naturales.
Exigieron a la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, mayor seguridad y justicia para quienes luchan por su pueblo, recordando que en su comunidad la población es la que tiene la última palabra al conducirse por usos y costumbres.
Llamaron a más zonas indígenas a pronunciarse por la seguridad en sus territorios, y buscar la justicia para aquellos que han sido encarcelados injustamente.
Entre las comunidades que acudieron a la marcha resaltaron de Ixcotla, Xaltocan, San Francisco y Magdalena, quienes señalaron que seguirán luchando para defender sus derechos humanos y tradiciones culturales.