Tras la liberación de Pedro N., originario de Guanajuato, quien fue culpado de un asesinato siendo inocente, familiares y amigos recuerdan el caso de Keren N., mujer originaria de Veracruz, que fue condenada a 50 años de prisión por el supuesto secuestro de un tlaxcalteca.
Junto con miembros del Colectivo Mujer Utopía, se congregaron frente a las instalaciones del Juzgado Penal del Distrito Judicial de Sánchez Piedras y Especializado en Justicia para Adolescentes, tras concluir la etapa de instrucción sobre el caso de Keren, con la posibilidad de dictar una sentencia absolutoria en el asunto en un plazo de 30 días hábiles.
El colectivo recordó que Keren, quien se estaba recuperando de una cesárea y cargaba a su bebé recién nacida, fue citada por su expareja; sin embargo, antes de llegar a la cita, sujetos armados la detuvieron a unas calles de su casa en Xalapa, Veracruz. Los hombres iban vestidos de civil y viajaban a bordo de vehículos de la Procuraduría de Tlaxcala y la extinta Policía Federal, quienes la acusaron de supuesto secuestro.
Era diciembre de 2015 y Keren tenía 19 años de edad. En esa condición se enfrentó a amenazas, golpes y tortura, por lo que terminó firmando una declaración de culpabilidad, que la condenó a 50 años de prisión, mientras que su pareja fue condenada a cinco años. Su bebé fue dado en adopción y recuperado años después por sus familiares.
En 2021, la familia solicitó un juicio de amparo y se ordenó que se realizaran diligencias en los últimos años. El pasado 27 de septiembre, el juzgado verificó que se violaron los derechos humanos de Keren.
Entre las irregularidades, se mostró que los agentes ministeriales de Tlaxcala y Federales no contaban con una orden de aprehensión al momento de la detención y que no había un proceso de investigación que permitiera justificarla.
Además, se logró confirmar que Keren N. tenía signos de actos de tortura en su estado emocional, derivados de malos tratos y amenazas, las cuales presuntamente fueron hechas para que la joven aceptara su participación y culpabilidad.
Los familiares suplican por la libertad de Keren N., tras nueve años en prisión.