El marinismo que hoy le entrega el poder a Rafael Moreno Valle vivió su "éxtasis" hace seis años. Lo mismo el melquiadismo que llegó rimbombante al poder. Las historias que se repiten. Suerte de círculo vicioso del poder.
Melquiades Morales Flores tomó protesta el mismo día que interrogaban los fiscales a Mónica Lewinsky, a finales del siglo pasado.
Al llegar a la alcaldía municipal, Mario Marín Torres ‚Äîcorría febrero de 1999‚Äî se definía: "Me gusta pensar en grande."
En febrero del 2005, al llegar Mario Marín Torres a la gubernatura, el gobernante saliente, Melquíades Morales se despedía.
"Ya no muchachos, ya no soy el gobernador, ahora vengo a visitar a un amigo."
Una cargada monumental recibía a Marín en el Centro de Convenciones. Ahora el ciclo se repite, con otros personajes.
El mismo día que 13 fiscales republicanos le hacían un interrogatorio de cinco horas a Mónica Lewinsky, la célebre becaria de William Clinton, en Puebla, Melquiades Morales Flores tomaba protesta como gobernador en el Centro de Convenciones de Puebla ante el pleno del Congreso Local.
"Mi gobierno no será refugio de simuladores o de indolentes."
El arribo de Morales Flores era bien recibido por los partidos de oposición, como el PAN, cansado de la disputa con el gobierno saliente de Manuel Bartlett Díaz y por la clase empresarial.
Desde la primera fila lo escuchaban, Germán Sierra Sánchez, secretario de Desarrollo Rural y Rafael Moreno Valle, secretario de Finanzas, quienes al final del sexenio melquiadista se enfrascarían en una lucha fraticida por la candidatura al gobierno del estado.
A la toma de protesta acudieron el presidente nacional del PRI, Mariano Palacios Alcocer; la senadora María de los Ángeles Moreno; el gobernador de Veracruz, Miguel Alemán; Luis Colosio Fernández, padre del extinto político priista.
El periódico El Sol de Puebla titulaba al nuevo gabinete: "Los poblanos esperan mucho de ellos."
Destacaban en la página 5 del Sol de Puebla las fotografías de los nuevos funcionarios estatales. En primer término, Carlos Alberto Julián y Nácer, secretario de gobernación; Rafael Moreno Valle, secretario de Finanzas; María Teresa Noemí Tello y Nieto, secretario de la Sedecap; Antonio Zaraín García, secretario de Desarrollo Económico; Gustavo Rosales Bretón, secretario de Turismo.
En su página editorial Manuel Guzmán Pérez advertía que si Melquiades Morales Flores quería ser un buen gobernante debería escuchar la voz divina.
"Melquiades Morales Flores sembró la fe suficiente para ser un hombre con corazón de siervo; un hombre que por su humildad de espíritu agrada a Dios y que si reconoce su señorío en su mandato, tendrá un éxito colosal en su gestión."
"Miles de cristianos están obligados y comprometidos a gobernar por él y su familia, por sus funcionarios y consejeros y sobre todo porque Dios le ilumine su entendimiento para tomar las decisiones que se oriente a bien y nos hagan un mejor pueblo."
El día 4 de febrero, el secretario de Finanzas, Rafael Moreno Valle le tomaba protesta al subsecretario de Ingresos, Egresos y Desarrollo Social, Francisco Adame Díaz, Fernando Manzanilla Prieto y Jorge Arroyo García. Con él llegaba el personaje más cercano al hoy gobernador, Fernando Manzanilla Prieto.
El éxtasis marinista
El miércoles 2 de febrero del 2005 Intolerancia diario titulaba el cambio de estafeta gubernamental con un par de vocablos: "?âxtasis marinista".
En primera plana aparecían en una fotografía, sonrientes, el gobernador saliente, Melquiades Morales Flores y el gobernador entrante, Mario Marín.
La primera medida de Marín era el establecer un horario para los nuevos funcionarios, a partir de las 8:00 de la mañana. Además, el gobernador que endeudó al erario por el orden de X mdp, sentenciaba un estricto manejo del gasto público. "Con estas dos disposiciones se terminarán los desayunos y comidas públicas en horario de oficina y con cargo al erario."
El anuncio de Marín en realidad sólo se acataría algunas semanas. Después sería letra muerta.
En su primer mensaje político, Marín anunciaba la mano dura. "No se vale perturbar el orden y el derecho al libre tránsito de los ciudadanos, por muy justas que sean las causas o motivos que se expresen."
"Hago un llamado a todos los grupos civiles, políticos y religiosos, para que antes de tomar y bloquear las calles, carreteras y edificios públicos que son patrimonio de todos, acudamos al diálogo una y otra vez, para que juntos encontremos las soluciones más justas y pacíficas."
El nuevo gobernante definía un perfil que poco cumplió durante su mandato:
"Con diálogo y buena fe se pueden resolver todos los problemas, por muy difíciles que parezcan. Los miembros de mi gabinete y yo actuaremos con sensibilidad, prudencia y tolerancia, para atender cualquier asunto. Tenemos la experiencia para hacerlo.
"Ya no muchachos, ya no soy el gobernador, ahora vengo a visitar a un amigo", así se despedía Melquiades Morales Flores al acudir a Casa Puebla para acompañar a Mario Marín Torres a su toma de posesión que se celebró en el Centro de Convenciones con una cargada monumental.
En cónclave en Casa Puebla, los exgobernadores Guillermo Jiménez Morales, Manuel Bartlett y Melquiades Morales desayunaron con Marín, reseñan las crónicas de Intolerancia.
El adiós de Hinojosa
En febrero de 1999, Mario Marín Torres llegaba al Charlie Hall luego de ganar la elección municipal.
El sábado 14 de febrero, el primer alcalde de oposición, Gabriel Hinojosa Rivero se despedía luego de tres años de gobierno municipal ‚Äîen pleno enfrentamiento con el Yunque y con el bartlismo‚Äî desde el Teatro de la Ciudad, acusando al nuevo alcalde Mario Marín de haber llegado a través de una elección "ilegítima". Por el contrario, el alcalde saliente Hinojosa Rivero tildó a Melquiades Morales nuevo gobernador, como un "hombre de diálogo."
En su último mensaje político, Hinojosa Rivero ‚Äîquien arribó al poder con 184 mil votos en 1995‚Äî evidenció la dureza de la política de Bartlett y los ataques que recibió la comuna. Hinojosa recordó que recibió de Rafael Cañedo Benítez un ayuntamiento con las arcas vacías. "Si hubiéramos permanecido en silencio, la sociedad nos demandaría por una posición cobarde."
El periódico La Jornada de Oriente titulaba el cambio municipal con una crónica. "La toma de posesión de Marín, festejo de priistas que regresan al ayuntamiento", y una nota informativa "no vengo a hacer negocios", afirma Mario Marín Torres al rendir protesta en su edición del 16 de febrero de 1999.
En la crónica de la llegada del nuevo alcalde relata que Mario Marín Torres arrancaba los aplausos de los asistentes cuando aseguró "no vengo a hacer negocios." En un auditorio de la Reforma repleto al que se llegaba luego de pasar un amplio dispositivo de seguridad.
El gabinete
Al llegar al poder como alcalde, Marín anunció un gabinete donde Mario Montero Serrano fungiría como secretario de la comuna; Víctor Manuel Sánchez Ruiz, como contralor; David Villa Issa como tesorero.
Los titulares de obras, Javier García Ramírez; Rufino Martínez Bruno en Desarrollo Urbano y Ecología; Pericles Olivares Flores, en gobernación; Jorge Mendoza Valverde en Servicios Administrativos; Ricardo Velázquez en el departamento jurídico; Javier López Zavala,en el DIF; Valentín Meneses Rojas en Comunicación Social. Y en las direcciones se nombró a Juan José Bretón en Turismo.