El coordinador de Asuntos Jurídicos del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Pablo Navarrete Gutiérrez, llamó a la sociedad a contener la violencia contra la mujer, pues el problema es ahora un “foco amarillo”.

Advirtió que de no atenderlo en el corto plazo, el problema será de color rojo por la incidencia y los tipos de violencia que llegan al feminicidio.

Somos una sociedad machista, misógina y sus patrones de convivencia económica, política, social y cultural se determinan por la cultura patriarcal en la que impera el poder del hombre sobre la mujer que es considerada como objeto, no como sujeto de derechos”, dijo.

Al participar en el foro “Feminicidio y la procuración de justicia”, en la sede de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), apuntó que “ese es el caldo de cultivo que explica tanta discriminación, tanta violencia, tanta vejación contra las mujeres”.

Apuntó que el porcentaje de violencia más elevado contra las mujeres es de carácter psicológico, al que le sigue el físico y sostuvo que el maltratar a una mujer, el humillarla, el decirle que no vale es la expresión más común y frecuente contra ese sector.

Son los dos niveles que hay de incidencia más recurrente, lo más grave es que a veces se llega al feminicidio, que es la expresión última de una serie de actos de violencia contra las mujeres y la expresión más dolorosa contra las mujeres, lamentó.

“El feminicidio tiene una presencia importante en la entidad, pero no se puede medir ni minimizar, no es tan alarmante el número de casos pero está presente, no hay estadísticas, apenas se están construyendo, grave es la situación con una sola víctima”, consideró.

La situación de frontera con Guatemala vuelve a Chiapas un escenario mucho más complejo por la migración, así como por la presencia de comunidades indígenas, razón por la que es indispensable frenar la discriminación y las agresiones contra las mujeres, indicó.

Agregó que en las zonas indígenas, escudados en los mal llamados usos y costumbres, se “permite o justifica” la violencia o la agresión contra las mujeres, por eso hay mucho trabajo que hacer y se está empezando la discusión para la tipificación de ese delito.

El reto es garantizar el acceso pleno de las mujeres a una vida libre de violencia y a la justicia, resaltó.