El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa señaló que en la reunión que sostuvo con el gobernador electo Luis Miguel Barbosa Huerta su petición ha sido no solo por la seguridad, sino que se atiendan otras necesidades de la sociedad como salud y educación.

Entrevistado al término de la misa dominical en Catedral, que fue dedicada a las víctimas del 10 de julio luego de que fue sepultada una familia por un deslave en la junta auxiliar de Santo Tomás Chiautla, el ministro señaló que habrá una relación de respeto con el gobierno del estado que entrará en funciones el próximo 1 de agosto.

Dijo que su deseo para Miguel Barbosa es que tenga éxito en los más de cinco años de gobierno y no se desatienda el tema del empleo así como la llegada de inversiones.

Comentó que espera estar presente en la toma de protesta el próximo jueves pese a que tiene un compromiso en la zona de Tulcingo de Valle, aunque podría cambiar su agenda.

Lamentó que cada vez sean más los casos de violencia que se registran en los municipios de Puebla, como fue el caso de la balacera que tuvo lugar en Tepeaca, y donde los ciudadanos buscaron resguardo en el templo del Niño Doctor.

Explicó que ya tuvo comunicación con el párroco de la zona, quien le detalló lo ocurrido y aseguró que se dio protección a la gente.

Comentó que cada párroco trabaja en su comunidad y tienen la instrucción de no bajar la guardia, pues insistió en que en esta época se requiere de oración para calmar la violencia que se vive en el estado.

Dijo que el día del enfrentamiento él se encontraba en Santa Ana Coapa por la región de Tepeaca y lo que le pidieron fue que no regresara por esa zona sino que tomara otra vía, y son situaciones que se viven.

“Esperamos que poco a poco se vaya resolviendo la situación con la presencia de la Guardia Nacional, el deseo del gobernador entrante se pueda salir de la situación que se vive desde hace algunos años".

Auxilio espiritual a fieles de Santo Tomás

De la misa ofrecida por las víctimas, indicó que desde que se tuvo conocimiento de la tragedia dio instrucciones al párroco para que auxiliara espiritualmente a las familias, para que oficiara las exequias.

Indicó que tuvo la oportunidad de que durante la misa dominical estuvieran no solo familiares de las personas fallecidas y lesionadas, sino gente de la comunidad.

Comentó que le llevaron a dos menores de brazos que se salvaron en la tragedia del 10 de julio lo que es visto como un  milagro por la magnitud de la tragedia que cobró la vida de seis personas, entre ellas dos menores de edad.

Recursos para la reconstrucción

Del tema de la reconstrucción dijo que se espera que ya se liberen los recursos para atender principalmente los conventos del Siglo XVI como lo son Tochimilco, Matamoros y Huaquechula.

Del templo de Los Remedios, indicó que sólo hubo daños en la cúpula por un rayo, pero en cuestión estructural no presentan daños estructurales.