Una desventaja de Puebla, dijo el catedrático de esa casa de estudios, es que los ríos que atraviesan la ciudad, están seriamente contaminados y si no hay acciones concretas la situación seguirá en decadencia los próximos 20, 30 y 50 años, “es tiempos que las empresas sean más eficientes en los desechos que generan y en el tratamiento de aguas residuales”.
La evaluación que tiene Flores Quijano, es que la entidad poblana tiene un serio problema en sus servicios y el principal es el agua, que es el más serio de todos, porque no hay un balance de concientización y no se realiza un uso del agua imprescindible.
Para mejorar las acciones sobre el uso del agua, el investigador reveló que hay procedimientos sencillos, entre ellos, si tienen contenedores grandes de agua, hay que colocar botellas de plástico llenas, con lo que se evita el desperdicio, pero también hay que tapar todas las fugas y regar los jardines por la mañana y por la noche pero no cuando el sol está en plenitud, “además de que todos deben bañarse en 10 minutos, para no desperdiciar”.
En el país, afirmó el catedrático, no hay una cultura del agua, pero además, no se paga lo debido, porque un hogar mexicano paga unos 2 mil pesos anuales por el agua, lo que se traduce en que una persona paga solamente 1.20 pesos diarios por tener agua limpia y por sus descargas, “hay que hacer un uso eficiente del agua, para que en 10 años no se paguen tanto recursos por el consumo del vital líquido”.