El Frente de Vendedores Tradicionales al mando de su presidenta Teresa Huitzil Torres exigieron diálogo a la administración municipal después de instalar sus puestos de nieve, bombas de jabón y chicharrones en el zócalo para reactivar su economía.

La dirigente de la agrupación Huitzil Torres, indicó que son alrededor de 40 comerciantes dedicados a la venta de juguetes, nieves, globos y productos de madera, quienes han sido ignorados por la Secretaría de Gobernación de René Sánchez Galindo.

En ese marco pidió una mesa de trabajo con la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco para lograr un acuerdo que les permita comercializar sus productos, para no replicar acciones violentas que la autoridad tuvo con otras organizaciones.

“Nosotros venimos a pedir que también seamos activados como lo decía el secretario de Gobernación (Sánchez Galindo), que se activaron espacios y permisos para que nosotros paguemos, pero no nos ha recibido, no es cierto porque a nosotros no nos ha recibido en ninguna reunión".

Priorizó que suma dos años de petición y no ve ninguna respuesta, pero hoy solicitó que la agrupación sea escuchada y que sean liberados los permisos porque no es justo que les pongan el dedo cuando otros ambulantes sí trabajan.

Dijo que han intentado trabajar en diferentes zonas del Centro Histórico para solventar gastos básicos, pero a base de operativos son retirados por la fuerza, sin dialogar.

“Ellos si buscan la manera de agredir y hemos visto en diferentes lados con otras organizaciones sus agresiones, pero no pasa nada más, siguen agrediendo con sus decomisos y no se ponen a pensar que nos cuesta con esta pandemia porque no tenemos facilidad de dinero”.

Bajo ese panorama, el secretario de la agrupación Héctor Huitzil, pidió al gobierno permitir instalarse en el corazón de Puebla para "regresar el folclor y las tradiciones".

“Queremos que en el zócalo donde se ha perdido la armonía familiar, regresen los ciudadanos a tomar un helado, comprar un globo y consumir antojitos”.

Anunció que se instalarán frecuentemente en el zócalo hasta que exista una solución a su petición para enfrentar la crisis económica.

“Queremos que la autoridad municipal utilice el diálogo y que no haya violencia porque nosotros no vamos a violentar a nadie, nosotros queremos que la autoridad nos respete, antes de utilizar la violencia que nos siente y dialoguemos, que se agote el diálogo porque es nuestro derecho”.