Aunque la afluencia se reduce 50 puntos porcentuales a diferencia del Día de la Madre, las visitas al principal cementerio de Puebla, 60 minutos antes del cierre, sumaron las 31 mil 274, que llevaron flores a los papás que adelantaron el camino al descanso eterno.

La jornada de este domingo de celebraciones fue blanca, valoró el administrador del campo santo, Andrés Serrano Vázquez.

Durante este nuevo panorama que permite la pandemia Covid-19, al ser menos violenta que en sus primeros dos años, las autoridades del ayuntamiento de Puebla diseñaron una estrategia para evitar contagios masivos, con medidas sanitarias con dotación de gel antibacterial, toma de la temperatura y una estancia no mayor a una hora.

Este domingo, las puertas del Panteón Municipal se abrieron temprano y cerraron a las 18:00 horas para recibir a 27 mil 605 personas, además la víspera llegaron y tres mil 669 visitantes a regalar flores y limpiar los sepulcros.

A largo de esta jornada, pasaron al anecdotario el extravió de un niño de poco más de dos años de edad al interior del cementerio, pero como todos los trabajadores del panteón usan radios, al igual que los Rayos de Protección Civil y del DIF, el infante fue entregado sano a sus papás luego de 15 minutos.

En la entrega del menor, participó también la dirección jurídica del DIF municipal para dejar en claro que el menor no tuvo ningún daño.

A lo largo de la jornada sabatina y dominical, participaron elementos de la Dirección de Tránsito y efectivos de la SSC, además de elementos de la Secretaría de Gobernación.

Hombres y mujeres de todas las edades, llegaron al panteón con palas, botes, escobas, carretillas; pero sobre un hombro algunos cargaban rollos de flores de 50 pesos, pero otros llevaron arreglos florales superiores a los 500 pesos desde temprana.

El panteón luce limpio, con las piletas con agua abastecidas, contenedores para basura, préstamos de sillas de ruedas y cubetas, además de un equipo de servicio de paramédicos que se encargaron de atender a cuarto personas de la tercera edad que al acudir solas se cayeron, pero sin problemas serios.

Pero en esta ocasión los puestos de ambulantes que ofrecían carnitas, tacos y gorditas se redujeron a tres.