La violencia desenfrenada que azota a México se observa en la desaparición de Roberto Carlos Olmeda Cuellar, Uriel Gálvan González, Jaime Adolfo Martínez Miranda, Diego Alberto Lara Santoyo y Dante Cedillo Hernández, además en el calvario de las mamás buscadoras, quienes son asesinadas también, ha censurado el Arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, al lamentar la polarización desarrollada por las propias autoridades que gobiernan.

Monseñor refrendó que todos los mexicanos "estamos" viviendo una situación muy triste y lamentable.

Desde la Basílica Catedral Metropolitana de Puebla, advirtió que las y los mexicanos, además "enfrentamos otro gran reto" de superar el desafío de la polarización política y social generada por las propias autoridades que gobiernan al país.

"Las mexicanas y mexicanos nos estamos dividiendo, pero los creyentes en Cristo, los discípulos de Jesús. No podemos permitir eso".

Priorizó que la población en lugar de mirarse como adversaria necesita entenderse y aceptarse, como hermanos, como pide el Papa Francisco.

"Todos somos hijos de un mismo padre Dios que esta en el cielo, sin importar que la división, polarización y discordia; situaciones que son propiciadas por los mismos que nos gobiernan, el mensaje de Cristo posee una fuerza mayor de cualquier ideología o corriente política, nuestra tarea es seguirlo con fidelidad, alimentarnos como lo hacemos cada vez que venimos a misa con su palabra y con su eucaristía".

Recordó que la Iglesia universal en México continúa invitando a todos a orar por la paz y ser constructores de la paz ante los desafíos de este círculo vicioso de inseguridad y violencia que presentan todas las y los mexicanos.

Acentuó que la violencia tiene que ver también con la situación de pobreza y desigualdad que se vive en territorio nacional.

"Debemos promover la verdad, la caridad y tratar de formarnos y educarnos en la paz, que se traduzca en el desarrollo integral de cada persona; ese es el motivo de nuestra jornada de este mes de oración por la paz que seamos constructores de la paz ante tanta violencia que vemos ante tantos desaparecidos que si en tal lugar que sin otro lugar que si ahora es en Lagos de Moreno, Jalisco estamos viviendo una situación muy triste y lamentable pidamos al Señor que nos dé su paz".

Ante ese panorama, insistió que algunas mamás han perdido la vida en ese intento de encontrar a sus hija o hijos, otras continúan buscando y hacen caso omiso a los riesgos.

Bajo ese horizonte subrayó que ojalá las autoridades tuvieran la actitud de Jesús, acompañada con esa sensibilidad ante el dolor ajeno de quienes buscan a sus hijos o viven en carne propia los lamentables hechos de los cinco jóvenes desaparecidos en Lagos de Moreno, Jalisco.

Sánchez Espinoza espera ya de esas actitudes insensibles de las autoridades que gobiernan al país den el apoyo necesario hay quienes buscan a sus hijos desaparecidos, pero además desarrollan acciones concretas para disminuir los índices de violencia que arropan a México.