El Festival Yohualichan, ritual de música y danza 2013, llegó a su fin este domingo 4 de agosto, después de dos días de actividad. El ayuntamiento de Cuetzalan, con el apoyo del Conaculta y del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Puebla (CECAP), llevó a cabo con gran éxito este festival que busca el reconocimiento de las costumbres y tradiciones de esta región. 

El secretario ejecutivo del CECAP, Moisés Rosas, presente en el Encuentro de Danzas Tradicionales realizado este domingo en la zona arqueológica de Yohualichan, enfatizó la importancia de difundir y dar a conocer la sabiduría inmersa en cada uno de estos rituales, además de promover la tradición oral, la riqueza artesanal y gastronómica de la región, patrimonio cultural tangible e intangible del estado. 

El centro ceremonial de Yohualichan fue el lugar donde se presentaron la mañana del domingo las danzas-rituales de la región y del centro de México. Quetzales, Negritos, Concheros, Santiagos, Voladores, Toreadores, Matachines, Migueles y Huahuas congregaron a miles de visitantes en ese lugar. Fueron alrededor de 30 grupos de danzantes los que estuvieron presentes en la edición 2013 de este evento. 

Pero, además de las danzas, en este festival la música tradicional el arte culinario indígena, la medicina tradicional y las exposiciones de artesanías hechas por artistas poblanos de la región fueron parte de los festejos en Cuetzalan del Progreso. Su presidente municipal, Arturo Báez Carmona, agradeció la participación de los artistas y subrayó que este tipo de celebraciones sin duda alguna engrandecen a Cuetzalan, Pueblo Mágico. 

Por su parte, Gregorio Méndez Nava, director de Casa de la Cultura de este municipio, quien además es uno de los principales promotores del evento, comentó: “Es un acontecer cíclico de nuestras vidas, es el tiempo de las cosechas que renacen con la música del Xochipitzahua, los santos sones y los huapangos”.

En lo que se refiere a la magna exposición de ceras tradicionales de las mayordomías, presentadas en el templo de la parroquia de San 
Francisco, en Cuetzalan, dejó en claro el talento de los artistas de esta comunidad. Cada una de las 18 piezas fue elaborada bajo la dirección del maestro Eugenio Méndez Nava, en colaboración con miembros de la comunidad artesanal. Asimismo, este evento integró una serie de talleres, como el de elaboración de máscaras de madera, cera tradicional, laudería y bordados tradicionales.