Con el agua hasta el cuello y una evidente desesperación, Sergio Bueno le pidió a la directiva del Puebla de La Franja paciencia y tiempo para entregar resultados con el equipo que este domingo en la frontera juega un partido vital frente a los Xolos de Tijuana.

Tras el entrenamiento de este viernes y del supuesto plazo que le impuso la directiva, el técnico camotero fue enfático al decir que él no vino a robar y que se ajustó al presupuesto que le dieron para armar a un equipo, que en estos momentos solo tiene 4 de 12 puntos posibles, es decir, apenas 25 por ciento de su productividad.

“Van cuatro partidos y ya me quieren cortar la cabeza; o sea, no lo entiendo, más si hablamos que aquí nos gusta la estabilidad, un marco de certeza, un trabajo serio. Yo aquí no vine a robar a nadie, hice un trabajo serio ajustándome a un presupuesto del club para armar un plantel competitivo”, dijo en un tono molesto Sergio Bueno, quien reconoció que el ambiente fuera del equipo no es el óptimo, pero él ha tratado de conjuntar a un equipo heterogéneo donde se integren los 21 nuevos elementos.

Incluso, reprochó las críticas que ha recibido el equipo y él en específico, después de la racha de dos derrotas consecutivas, pero sobre todo por la forma de juego que le acarreó abucheos la semana anterior en el duelo contra Jaguares de Chiapas.

“Arrancamos con dos partidos y varios medios manejaron que el equipo jugaba espectacular y ahora resulta que el equipo no tiene idea e identidad, pues ¿qué pasó?, ¿ya cambiamos el discurso de una semana a otra, porque los resultados fueron negativos?

”Te aseguro que si el equipo gana los dos partidos que vienen, (los medios) van a hablar de manera diferente. Esos son los altibajos que tiene esta profesión, y es el cuento de nunca acabar.” 

Sergio Bueno señaló que la marcha del equipo es también responsabilidad de la directiva, a la que le mandó un mensaje directo.

“Me parece que la responsabilidad absoluta para marcar el rumbo de una institución no es mía, es de los dueños y dirigentes; ellos tienen que decir que aunque llueve, truene o relampaguee, los plazos se cumplen, los proyectos se respetan. Hay una forma de trabajar, de entrenar y los objetivos están definidos; ahí quiero llegar y de ahí nadie me mueve si tienes el cuerpo técnico adecuado, si no, no hay que dar plazos hay que cortar de inmediato, esa es la realidad y aquí no hay que andarse con cuentos.”

Puso el ejemplo de Ignacio Ambriz, Daniel Guzmán y Diego Cocca quienes en su inicio tuvieron resultados adversos y gracias a la paciencia de la directiva se mantienen en sus equipos con un paso diferente.

Por eso, independientemente de lo que suceda en el juego del domingo contra los Xolos de Tijuana, aseguró que el equipo va encontrando un estilo, ya que de un día para otro no se puede conseguir identidad con la afición.

“El trabajo diario, la práctica de las jugadas y otros aspectos provocan que un equipo tenga una idea de juego; obviamente, si se dan los resultados, el día de mañana se genera una comunión con la afición y una identidad que no se compra en la farmacia o de un día para otro.”