España está a solo un punto de las semifinales de la Copa Davis, en la que se cruzará con el ganador del Francia-Estados Unidos, al vapulear a Austria en los dos primeros partidos.
Nicolás Almagro dio el primer punto al batir con solvencia a Jurgen Melzer (6-2, 6-2, 6-4) y David Ferrer apalizó a Haider-Maurer (6-1, 6-3, 6-1) en menos de una hora y media.
Junto con el doble el Almagro-Melzer a priori era el partido más equilibrado, pero el murciano no ha dado opción a su rival, número 21 del mundo, que fue aplastado y solo dio el nivel en el último set. Al igual que en Oviedo, Almagro ha respondido a la confianza depositada en él en un partido que fue amenazado por la lluvia matinal caída en Marina d’Or.
“Puede que haya sido mi mejor partido en Copa Davis. Era difícil y tenía que afrontarlo con tranquilidad. Yo sabía que iba a estar nervioso, y salté tenso a la pista y así estuve los tres o cuatro primeros juegos, pero me solté la melena y el tenis ha fluido. Sabía que iba a tener opciones, pero tenía que jugar con inteligencia. Además, él no ha estado cómodo en ningún momento y estoy feliz por la victoria”, dijo Almagro a TVE.
Tampoco falló David Ferrer, que superó sin problemas a Andreas Haider-Maurer, número 139 del mundo, que se lesionó en el transcurso del segundo set.
“Ha sido más fácil de lo esperado, ha fallado mucho, yo he hecho mi juego sin grandes cosas. Ha sido un partido un poco extraño porque tampoco me ha dado ritmo, ha fallado muchísimo y por momentos he perdido la concentración. Él no ha estado a la altura, he ganado muchos puntos gratis y así he pasado casi todo el partido”, comentó David Ferrer.
Este sábado está previsto que Marc López y Marcel Granollers jueguen el dobles ante Alexander Peya y Oliver Marach. Sin embargo, las molestias en la espalda de Marc López abren la posibilidad de que jueguen Almagro o Ferrer. “Marc estaba triste y queremos que se recupere. Si no llega hablaremos con Ferrer y Almagro para ver quien juega”, explicó Corretja.