La propuesta de legalización del estatus migratorio de alrededor de 6 millones de personas en Estados Unidos, parece parte de un juego político del partido republicano y no una verdadera propuesta de corto plazo.

Así lo afirmó el responsable de asuntos migratorios del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría (IDHIE) de la Ibero Puebla, Guillermo Yrizar Barbosa, “sabemos que son intentos muy incipientes”.

También nos preocupa el juego político del partido republicano, especialmente con el “plan dignidad”, desde el Congreso, porque es hablar de un camino a la ciudadanía de alrededor de 6 millones de personas.

Esa cantidad de migrantes indocumentados, dijo, no es poco y la mayoría de ellos provenientes de México y de Centroamérica, pero es una propuesta que es todavía muy prematura e incipiente.

Desde su percepción, el “plan dignidad” no es diferente de otras propuestas que han hecho en el pasado, porque habla mucho de la frontera y que van a durar varios años para poder regularizarse, “habla de hacer más expedito el sistema de asilo a las personas que lo solicitan”.

El estatus migratorio se ha convertido en un obstáculo sumamente determinante para las trayectorias de vida de 11 millones de personas, mexicanas, latinas y asiáticas".

"Entonces, en particular, la población mexicana, de origen mexicano, pero también de origen asiático y latinos en general, están en una posición política para tratar de buscar una posibilidad de mejora en sus vidas".

"En el área de Asuntos Migratorios del IDHIE de la Ibero Puebla, dijo, estamos al tanto de la situación de la migración indocumentada en Estados Unidos y de los recientes intentos de propuestas de ley, de reformas, para tratar de regularizarlos".

Nos preocupa mucho que pueda ser algo del discurso político y sea muy lejano de la realidad”.

Yrizar Barbosa, dijo que, algo de lo que se habla muy poco en el debate político, es que cada vez es más determinante y más difícil cambiar su estatus migratorio para tener una mejor vida.

Lamentablemente, dijo, en México tampoco estamos muy conscientes de ese punto, al menos no desde el punto de vista de las políticas de gobierno.

Yo creo que, hay muchos colectivos de latinos, de mexicanos y de asiáticos, que no tienen opciones de legalización, porque estamos a casi 40 años de la última gran reforma migratoria, la de 1986”.

Sin embargo, hay un componente político muy importante que va a seguir, mientras en el Congreso, hay demócratas y también republicanos que se cierran a la posibilidad de regularizar a las personas hacia un tema que es muy polarizante, que está muy lejos que se pueda concretar y no hay una negociación política.

La propuesta del plan dignidad, de la congresista María Elvira Salazar, del partido republicano, es un intento de cambiar el discurso dentro de su partido.

Todo indica, dijo, que lo hace pensando en las elecciones que se vienen para acercarse a los latinos, a los votantes asociados a la migración indocumentada.