Una vez arrancado el proceso electoral de manera formal, al interior del Partido Acción Nacional (PAN) se observa que se diluyen los signos de inestabilidad entre los actores más destacados del instituto político en el Estado de Puebla.
Para el politólogo de la UPAEP, Juan Carlos Espina Von Roehrich, se observan que en el panismo poblano están en reorganización, “los signos de confrontación que había apenas hace unos meses se están diluyendo”.
Por eso, aseveró que, dentro de la confrontación interna se observa muy remoto que pudiera presentarse un signo de inestabilidad, sin embargo, es seguro que se registre una contienda fuerte por los diferentes cargos que estarán en juego dentro de la alianza Va por Puebla.
Lo que se viene, aseguró es una confrontación y una pelea por los demás cargos de elección popular, pero eso se dará entre los tres partidos políticos que conforman la coalición, el PAN, PRI y PRD, pero será una vez que lleguen los tiempos de la designación de candidatos.
Sin embargo, a los institutos políticos coaligados les ayuda mucho tener desde ahora, la figura por la candidatura a la gubernatura poblana en el actual presidente municipal de la capital del Estado, Eduardo Rivera Pérez.
Lo cierto es que todos se midieron ahí y sabían que no tenían mucho que pelear, porque no les alcanzaba el capital individual para competirle al edil capitalino la candidatura.
Y eso, dijo el académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Gobierno de la UPAEP, es una buena señal, porque ya se midieron y cada uno de los liderazgos conoce sus fortalezas.
Lo que viene, señaló, es que salgan a competir y no se queden con la idea de buscar cargos de representación proporcional, solo para asegurar que tendrán la representación en esos cargos.
Cabe mencionar que la representación proporcional es el principio de elección basado en la asignación de cargos de representación popular tomando como base el porcentaje de votos obtenidos por un partido político en una región geográfica determinada.
Y el objetivo de este principio es proteger la expresión electoral cuantitativa de las minorías políticas y garantizar su participación en la integración del órgano legislativo, según su representatividad, para garantizar que toda la sociedad tenga voz en esos espacios.
Esas asignaciones se llevan a cabo a través de fórmulas matemáticas, por eso, no espera que perfiles con algo de competitividad busquen esos espacios y, al contrario, salgan a hacer campaña.
En el PAN, dijo el analista político de la UPAEP, los liderazgos empiezan a alinearse y la realidad se ha ido imponiendo a través del hecho verificable de la mayor competitividad de Eduardo Rivera sobre cualquier otro actor de los partidos de la alianza, donde ninguno tiene nada que hacer.
En ese escenario la opción es buscar otro cargo, dijo Espina Von Roehrich, y para ello el signo de disciplina y alinearse es la mejor carta de presentación, por eso buscan otra opción, pero se tiene que alinear.
“Hay mucho que repartir en candidaturas y muchos quieren el cargo y no la responsabilidad de cargar bajo sus hombros una competencia en cargo electoral y no entrar en campaña”.