Cinco personas en el sur de China han sido acusadas por daño intencional en el caso de un adolescente que vendió un riñón para comprar un iPhone y un iPad, informó el viernes la agencia de noticias oficial Xinhua.
Los cinco acusados incluían a un cirujano que extrajo el riñón del joven de 17 años en abril del año pasado. El adolescente, identificado sólo por su apellido Wang, ahora sufre deficiencia renal, dijo Xinhua, citando a los fiscales en la ciudad de Chenzhou, en la provincia de Hunan.
Según el reporte de Xinhua, uno de los acusados recibió cerca de 220.000 yuanes (unos 35.000 dólares) para arreglar el trasplante.
Le pagó a Wang 22.000 yuanes y dividió el resto con el cirujano, los otros tres acusados y otro personal médico.
El reporte no indicó quién recibió y pagó por el riñón.
El adolescente era de Anhui, una de las provincias más pobres de China, de donde sus habitantes frecuentemente se van para encontrar trabajo y una mejor vida en otros lugares.
Compró un iPhone y un iPad y cuando la madre le preguntó de dónde había sacado el dinero, admitió haber vendido un riñón.
Los productos de Apple son muy populares en China, pero están fuera de alcance de muchos chinos. Los precios de los iPhones
arrancan en los 3.988 yuanes (633 dólares) y los iPads se venden a partir de 2.988 yuanes (474 dólares).
La deficiencia renal de Wang se está deteriorando, informó Xinhua citando a los fiscales.
Sólo una porción de las personas que necesitan trasplantes de órganos en China puede conseguirlos, lo que genera un “turismo de trasplante”, donde los pacientes viajan a otros países para realizar ese tipo de operaciones, y un mercado negro de órganos humanos.
China prohibió el tráfico de órganos humanos en el 2007, informó Xinhua. Otros sospechosos involucrados en el caso aún están siendo investigados.