Tras rendir un homenaje al padre Gustavo Rodríguez Zárate por su defensa a los derechos humanos y protección a los migrantes, durante la llegada de la Antorcha Guadalupana, la Pastoral de Movilidad Humana de la arquidiócesis de Puebla, dio a conocer que la presencia de ciudadanos haitianos que cruzan el territorio poblano, es baja con relación a la que se presenta en otros estados.
Manuel Romero, sacerdote nombrado por el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa como encargado de la pastoral, que antes se llamaba del Migrante, indicó que se mantendrá el trabajo el sacerdote Rodríguez Zárate fallecido hace tres meses, mientras en la capital hay tres albergues para atender a los migrantes.
Teniendo como escenario el altar mayor con la fotografía del “Cura Rojo”, y la Antorcha Guadalupana que llegará a Nueva York, el encargado de la pastoral se refirió a la nueva nacionalidad de los migrantes que pasan por el territorio nacional, donde ahora destacan los haitianos que huyen de su país por la violencia y los fenómenos naturales.
Indicó que en los últimos días atendieron a un grupo de 10 ciudadanos de la isla caribeña, dándoles hospedaje por una noche, ropa limpia, así como alimentos.
Dijo que es en el norte del país donde los haitianos se encuentran en mayor número, principalmente en Ciudad Acuña.
Del Padre Gustavo, recordó que fue promotor de la Antorcha Guadalupana, altruista y que dedicó su vida sacerdotal a la defensa de los derechos humanos de los migrantes y de los más necesitados.
El padre Gustavo, en sus 48 años de servicio sacerdotal, se preocupó y se ocupó de la atención a los migrantes en su paso por Puebla: los alimentó, los abrigó y les ayudó, siempre de manera desinteresada, con la finalidad de que llegaran a su destino.
“Por todo ello, lo recordamos con cariño, pero sobre todo, nos esforzaremos por asumir su legado. La Pastoral de la Movilidad Humana y Atención a Migrantes de la Arquidiócesis de Puebla continuará la labor del Padre Gustavo y buscará atender en sus necesidades a nuestros hermanos migrantes”, dijo el nuevo encargado de la pastoral.
Señaló que la ayuda será por medio de una red de albergues de acogida, los cuales se encuentran en las Parroquias de: Nuestra Señora de San Juan de los Lagos, Nuestra Señora de la Asunción y Nuestra Señora de los Desamparados.
Labor por los jóvenes
En el homenaje, recordaron que el Padre Gus no solo apoyo a los migrantes, sino que dio refugio a los jóvenes para que siguieran sus estudios, y una de sus hijas espirituales recordó que nunca les faltó comida, y un techo, pero además como un buen ser humano decía: “Ve a comprar la comida y las chelas”.
Asimismo, de cómo se quedaba sin chalecos, ya que si veía que alguien lo necesitaba más que él, se lo regalaba, y cuando le robaron su auto simplemente dijo “no nací en coche”.
La Antorcha sin el padre
De la carrera Antorcha Guadalupana se recordó que fue la parroquia que recibió a tantos migrantes durante estos años, siendo el promotor Rodríguez Zárate, y ahora recorrerá 9 estados de la República Mexicana y 13 de Estados Unidos, llevando fe y esperanza a muchas comunidades y uniendo a muchos hermanos migrantes.
En el último año más de un millón de migrantes han sido deportados, de los cuales más de la mitad son mexicanos, cerca de 200 mil son centroamericanos y el resto se trata de personas originarias de Ecuador, Colombia, Venezuela, Cuba, Haití y Brasil.
La Antorcha Guadalupana busca ser un signo de esperanza y un llamado a las autoridades para que nuestros hermanos migrantes reciban un trato digno y humano.