El año que termina no fue del todo bueno para el sector de la construcción, por eso prevén un entorno complicado para el 2016, reconoció el presidente de la CMIC delegación Puebla, Alberto Ramírez y Ramírez, quien reveló que las perspectivas pueden crecer al tratarse de un año electoral.
Dijo que en el Estado de Puebla se realizaron obras grandes, sin embargo la CMIC no tuvo mucha participación en esos contratos, porque la mayoría de sus empresas carecen de la infraestructura y los recursos para absorber esas inversiones.
Agregó que el sector de la construcción se verá disminuido, “y con todo eso, somos el organismo empresarial que más capacitación le ha otorgado a sus trabajadores, ningún organismo le ha dado tal importancia ni ha logrado estos resultados”.
Ramírez y Ramírez señaló que los constructores, esperan que al ser un año electoral, pueda mejorar para los empresarios de la construcción adheridos a la CMIC, “esperamos que sea un 2016 bueno para nosotros, porque por estadística los años electorales tienen un mejor comportamiento y esperamos que este año no sea la excepción”.
El dinero no espera, dijo, por eso los inversionistas necesitan agilidad en los proyectos, porque si no se da, el recurso se va a otros proyectos.
“Puebla representa el 2.2 por ciento de la obra que se realiza en el país y en nuestro Estado la mayor parte de obra es de infraestructura”, afirmó.
En el Estado de Puebla, las elecciones hacen más dinámica la economía, reveló, por eso, reiteró que esperan que así suceda en el año venidero, para tener mayores y mejores opciones de oportunidad en la construcción, “vamos a seguir fortaleciendo la capacidad de las empresas y seguir invirtiendo y trabajando en Puebla”.
Obra privada compensa la carencia gubernamental
El presidente de la CMIC, aseguró que en el Estado de Puebla, la obra privada significa el 57 por ciento del sector y el 43 por ciento es de obra pública, por eso, dijo que el sector privado es el que compensa la actividad de los constructores.
Y aunque el 2016 será un año esforzado, Ramírez y Ramírez, reveló que las oportunidades serán escasas, “por eso hay que ser mejores en la participación y lo que puedan ofrecer a los sectores público y privado, para lograr los contratos. Tenemos que cuidar los nichos de oportunidades”.
Dijo que para impulsar el sector de la construcción, lo que debe suceder tiene que ver con aspectos multifactoriales, “tiene que haber más creatividad por parte de las empresas, correr más riesgos y por supuesto una colaboración importante entre las empresas y gobiernos, que es una llave importante y haya una mejor derrama económica”.
2016 con pronósticos económicos a la baja
Para Alberto Ramírez y Ramírez el 2016 -aunque electoral-, tampoco es garantía de una mejor economía porque se prevé un pronóstico a la baja, “en el 2016 la economía parece que toma un rumbo muy parecido al presente año, que no es un año malo pero lamentablemente tampoco podemos hablar que es un año bueno, digamos que es bueno a secas”.
Incluso, mencionó que se prevé un año forzado, porque se considera un crecimiento del 2.6 al 2.8, “pero generalmente y lamentablemente estamos acostumbrados a que los números se mueven a la baja y no a la alta”.
Aclaró que por los anuncios gubernamentales, el sector público tiene un presupuesto más reducido, por eso, consideró que será un esfuerzo muy importante, “pero el sector privado tiene una dinámica importante y es ahí donde la economía en el sector, puede tener un apoyo relevante”.
Contrario a eso, dijo que el sector privado tiene buenas expectativas porque es un sector que mantiene su dinamismo, “no vemos por qué se pueda frenar el sector privado de la construcción, pero el sector público tiene recortes importantes en el presupuesto”.
Obra del 2015 enfocada a infraestructura
En una evaluación del año que está por terminar, el presidente de la CMIC, dijo que la obra pública, fue dinámica, pero estuvo enfocada al sector de infraestructura, “pero para las empresas de la CMIC, como eron proyectos importantes, no tenemos empresas grandes como para afrontar proyectos muy grandes, eso es una realidad”.
Por eso, afirmó que en el rubro de la obra pública, fue un año difícil y complicado, porque hubo poca participación, “no fue la participación esperada y esperamos tener mejor suerte el próximo año, pero el 2015 no fue un año bueno”.