El jefe de sicarios del desaparecido cartel de Medellín, John Jairo Velásquez (alias Popeye), pidió hoy perdón al ex vicepresidente de Colombia, Francisco Santos, por su secuestro en 1990, informó la cadena privada RCN.

El confeso narcotraficante coordinó el secuestro de Santos, quien era jefe de redacción del prestigioso diario El Tiempo, y estaba dispuesto a ejecutarlo si la Asamblea Constituyente aprobaba en 1990 la extradición de colombianos a Estados Unidos.

El cartel de Medellín le declaró la guerra al Estado colombiano para evitar que se aprobara la figura de la extradición de los narcotraficantes a Estados Unidos.

Velásquez, quien admitió haber ordenado el asesinato de más de 250 personas, pidió perdón a Santos, quien lo entrevistó para la cadena privada RCN, donde tiene el cargo de director de noticias.

Recordó que con el secuestro de Santos, el máximo capo del cartel de Medellín, Pablo Escobar, “buscaba presionar al periódico El Tiempo y a su director, Hernando Santos Castillo, para que cayera la extradición en Colombia”.

"Yo he sembrado para este perdón. Este problema se arregla hablando con la gente, porque en este país si no se da el perdón no hay nada, y no se puede construir y uno sabe que él tiene el corazón grande", afirmó el jefe de sicarios quien lleva más de 20 años preso.

En la entrevista contó que Escobar contempló la posibilidad de secuestrar en Nueva York a la esposa del industrial Julio Mario Santo Domingo.