Erika Martínez, madre de una menor víctima de abuso sexual, recriminó al presidente Andrés Manuel López Obrador que le dé más importancia a una pintura que a la violencia que viven las mujeres en el país, particularmente por la agresión que sufrió su hija de siete años. 

El reclamó ocurrió la tarde del lunes, durante la subasta de los cuadros que pintaron las activistas durante la toma de las instalaciones de la CNDH, ahí, Erika Martínez tomó la palabra para repudiar la postura del mandatario. 

Frente al cuadro de Francisco I. Madero, la mujer dijo: “estas flores, estos labios pintados los pintó mi hija, una niña que a los siete años fue abusada sexualmente. Quiero decirle a ese presidente que cómo se indigna por este cuadro y ¿por qué no se indigna cuando abusaron de mi hija”.

Cabe destacar que la subasta de los cuadros ocurrió después de los comentarios del presidente quien dijo respetar todas las manifestaciones, pero reprobó “el vandalismo”, en las instalaciones de la CNDH, hoy convertido en un refugio para mujeres.