El tío de Enrique Peña Nieto, Arturo Peña del Mazo, departió con empresarios poblanos en el hotel Camino Real de La Vista, y afable con los empresarios poblanos, saludó mesa por mesa a los convidados a la comida; además accedió a fotografiarse con los comensales.
Del Mazo habló largo y tendido con su auditorio sobre el porvenir de la nación mexicana, y las que él considera las causas del retraso en nuestro país.
En especial, describió que nuestro país vive en el retraso porque los mexicanos viven con tradiciones y creencias perjudiciales, como una exaltación desmedida a los valores de la muerte y no a los valores de la vida.
Entre los asistentes a la comida se hallaban Humberto Espino Roldán, Luis Alberto Lima, Sergio Caballero, Rubén Terán Ávila, Nadia Hernández Carreón, Fernando Chevalier, Jorge Arroyo, Marco Antonio Jiménez, Wilfrido Pérez Garrido y Antonio Hernández Contreras.
En su intervención, del Mazo explicó la función de la Fundación Isidro Fabela, organización que estima como importante el conocimiento del ser humano.
“La cultura ha movido el progreso del mundo a través de los siglos, la cultura es la conversión de las ideas en actos. Los seres humanos progresan al aplicar el conocimiento”, indicó.
Peña del Mazo explicó a su auditorio que la tecnología, el arte, y la cultura política o civilización son las áreas en las que se concentra el conocimiento humano y su desarrollo.
El político mexiquense, como filósofo, dijo que en la actualidad el mundo jerarquiza la tecnología y luego la civilización
El tío del aspirante a Los Pinos no se conformó con hacerla de un García Canclini dominical, sino que expresó su propia visión del país en el tema del desarrollo cultural:
“En México, en lugar de tener cooperación tenemos hostilidad. La tradición tiene cosas muy buenas pero también prejuicios y supersticiones que no son conocimiento. Tenemos el país más rico del planeta en vez de cooperar nos hostilizamos y las ideas las generamos pero no las aplicamos. Somos un país imitador.”
Dicharachero sentenció: “Somos una jaula de monos imitadores.”
Peña del Mazo dijo que en México se empieza venerando a la muerte y se le termina sacralizando: “Le damos sentido a la muerte y no a la vida. Eso es estupidez y retroceso.”
En declaraciones a Intolerancia Diario, el presidente de la Fundación Isidro Fabela, Arturo Peña del Mazo, enlistó que actualmente México se encuentra desunido, por lo que su sobrino Enrique Peña Nieto, en caso de ganar las elecciones del próximo año —dijo— enfrentará con gran pasión la tarea de unificar a los mexicanos.
Además, afirmó que se siente muy a gusto entre los poblanos porque han sido muy cordiales con él: “Me tratan excelentemente bien, la sociedad poblana es una de las sociedades políticamente más desarrolladas del país y esto es un aliciente. He estado aquí en la universidad, también tengo la convicción de que la Universidad Autónoma de Puebla es una de las universidades que debe destacar a nivel nacional, en el cambio que viene hacia futuro”.
—Como presidente de la Fundación Isidro Fabela, y luego de que ha hablado sobre el tema de educativo, ¿cuáles serían las propuestas de Enrique Peña Nieto en ese rubro?
—Él acaba de presentar un libro donde saca todo el pensamiento que tiene respecto a varios temas. Y como él lo dijo, un planteamiento de entrada no es un programa de gobierno, no es un compromiso puntual, sino es un referente porque en ese libro él expresa lo que él cree, lo que él piensa en ese momento que arranca su carrera como aspirante a ocupar la Presidencia de la República. Ojalá todos lo hubieran hecho, porque Enrique Peña Nieto tiene la ventaja de que ahí establece en forma global y puntual qué, cómo, cuándo, dónde y por qué, sobretodo el costo que va a implicar la serie de cambios que va a empujar en el país.
—¿Cuál es su valoración de Enrique Peña Nieto?
—Yo diría que como persona es un hombre absolutamente leal con su familia, con sus amigos, con sus representados. Es un hombre que es congruente, de tal manera que cuando Enrique Peña Nieto diga algo, lo que sea, hay que tomarlo en serio porque en realidad él actúa congruentemente con eso. En otros casos no será así. Pero en él, la congruencia y la lealtad a su patria, a su sociedad, a México son fundamentales.
—¿Y cómo político?
—Como político creo que la pasión que él trae, de entrada es la posibilidad de unificar a México, porque el país actualmente está desunido, disperso. Se debe unificar para que a través de esa unidad se planteen y se lleven a cabo todas las principales aspiraciones, ideales y sueños de los mexicanos.