A partir del próximo 5 de mayo y hasta el 8 de julio, el ayuntamiento de Puebla suspenderá toda la difusión de obras, programas sociales y diversas actividades por el proceso electoral.

No así su ejecución pues, para el alcalde, un proceso electoral no puede paralizar a los gobiernos y afectar a los ciudadanos que esperan respuesta de sus autoridades, anunció el presidente municipal, Eduardo Rivera Pérez.

En entrevista, el alcalde poblano precisó que la ley es estricta sobre el inicio de la veda electoral para los gobiernos de todos los niveles, por lo que su administración se apegará a los lineamientos establecidos por las autoridades electorales.

De igual manera, explicó que no contratarán espacios publicitarios para difundir las labores de su administración, pues es la única limitante que tienen las administraciones, de no promocionar las acciones porque se pueden malinterpretar con tintes electorales.

“La obras no se van a parar. No podemos parar la marcha de la ciudad por el tema de las campañas, vamos a continuar con la ejecución de programas y de obras. Lo que la ley señala es que no se pueden contratar espacios publicitarios para promocionar, ya sea el arranque, la inauguración o la entrega de los beneficios.”

Abundó en que no pueden frenar el desarrollo de la ciudad durante dos meses por la realización de las campañas políticas, de tal suerte que respetará la ley tal y como lo hizo en el reciente proceso federal.

“Seguiremos con los programas sociales; estaremos también arrancando obras y entregándolas. No podemos pagar espacios para que eso se difunda en los medios, que es lo que prohíbe la ley.”

Destacó que las normas son firmes y exigentes, por lo que las propias autoridades electorales estarán atentas para que se cumpla con cada unas de las reglas trazadas en el Código Electoral, y así evitar alguna violación antes, así como durante el proceso.

Incluso, indicó que los medios de comunicación serán convocados a los trabajos públicos que realice la administración, para fiscalizar que las obras y beneficios que se entreguen no se usarán con tintes o intereses políticos.

“Nosotros no podemos parar ni el curso ni la marcha de la ciudad; tendremos que seguir con las obras, sino imagínense: tendríamos que suspender dos meses las obras, y éstas deben seguir.”