El gobernador Rafael Moreno Valle tiene más de 300 averiguaciones abiertas contra un número importante de ciudadanos que lo único que hacen es representar la defensa de sus derechos humanos, de sus tierras y de sus usos y costumbres, afirmó el abogado laboral, Abelardo Cuellar Delgado.
Moreno Valle, recordó Miguel Guerra Castillo, vocero del magisterio disidente, calificó de mafiosos a algunos dirigentes de los transportistas, como forma de amedrentar y amenazar con ser encarcelados, “cuando vemos que la mafia está en el poder, es un hampón, es un elemento de la mafia mexicana”.
La persecución, dijo, se presenta como una constante o como una forma para inhibir el descontento social, por eso, dijo que jurídicamente hay muchos elementos para defenderse y para salir adelante, “pero hay que entender que la lucha va a llevar tiempo”.
"Todos los que corremos riesgo de perder la libertad en el futuro, afirmó, tenemos que estar preparados y transmitir a los demás la información que no se desanimen, porque es cuestión de tiempo, “a Rafael Moreno Valle le quedan menos de dos años”.
Por eso, dijo Cuellar Delgado, todas las organizaciones tienen que bloquearlo para que no llegue a la presidencia de la República, “porque si ya vemos cómo actúa como gobernador, nos preguntamos cómo nos tratará como presidente, por eso hay que cerrarle los caminos a ese tipo de represores”.
Lo que no deben dejar de lado, aseguró el abogado laborista, es que una vez que la persona obtiene su libertad y que el gobierno no proporcionó todos los elementos se tiene que buscar la responsabilidad del ministerio público o de los jueces que se prestaron a integrar las averiguaciones o procesos que no tienen los elementos para tener a las personas presas.
Se trata, dijo, de contrademandar, porque es injusto que los presos políticos salgan solamente con un “usted perdone”, por eso, afirmó que deben seguir los cauces legales para resarcir el daño.
El gobernador Moreno Valle, dijo Miguel Guerra Castillo, no se caracteriza por tener una posición de negociación como gobernante, sino que trata de intimidar a los diferentes sectores de la población para frenar las acciones reformistas.
Por eso, coincidió en que los grupos sociales se pueden defender y la clave es generar una red social para informar que todas las averiguaciones y los procesos que no tengan el respaldo.
Que en el país, dijo, “esa información pueda servir para que se sepa qué tipo de gobernante tenemos en Puebla y que ese gobernante puede ser el presidente de la república.”
De ser así, toda la sociedad mexicana deberá atenerse a las consecuencias, señaló. “La alianza entre grupos puede coadyuvar a frenar las aspiraciones presidenciales del actual gobernador poblano”.
A decir de Abelardo Cuellar Delgado, los luchadores sociales tienen muchos elementos para defenderse y para salir adelante, pero hay que entender que la lucha va a llevar tiempo.
“Todos los que corremos riesgo de perder la libertad en el futuro tenemos que estar preparados, dar información que no se desanimen, es cuestión de tiempo, porque le quedan menos de dos años”, dijo.
Por eso, reiteró que tienen que generar una amplia red de solidaridad para que todos como ciudadanos y colectivos informen permanentemente el estado que guardan los presos políticos y visitarlos para que no sientan que están solos.
La primera lección que deben aprender todos los grupos sociales y opositores al proyecto de gobierno, es que la lucha no se debe dar en forma aislada.
Dijo que lo recomendable, es que todos los grupos que tengan presos políticos y perseguidos políticos deben sentarse entre ellos y empezar a intercambiar información, porque la estrategia legal es fundamental.
En el caso de los presos políticos que han obtenido su libertad se ha visto que a través de los amparos y el tiempo se demuestra que el Estado no tiene los elementos para encarcelar a las personas que luchan por sus diferentes derechos.
La lucha social, reveló, es cuestión de tiempo y de solidaridad y que el gobierno de Moreno Valle tiene como principal característica la represión.
Por eso, “al momento en que definamos que el gobierno es represor, todas las organizaciones sociales tienen que hacer un solo frente, para presentar la denuncia a nivel local, nacional e internacional”.
Empero, aclaró que no se puede lograr si no están unidos, “y esa es una de las enseñanzas que debemos sacar de estos 4 años de represión”.