El representante de la Coordinadora Estatal de Transporte Público de Pasajeros y Mercantiles, Arturo Loyola, sostuvo que los llamados “taxis pirata” que operan en el Periférico no son competencia desleal, una vez que las nuevas unidades que circulan en la ruta Bicentenario no son capaces de atender la demanda. Además, destacó que la regularización de los taxis atacaría el desempleo.

En entrevista, donde además indicó que se espera que antes de febrero haya un ajuste a la tarifa del transporte de por lo menos un peso, Loyola González dijo que, de acuerdo a la Secretaría de Infraestructura, se trata de al menos 400 unidades las que están prestando el servicio de manera irregular y destacó que no han registrado accidentes.

Dijo que si se quiere atacar el desempleo, se estarían generando al menos 400 fuentes laborales, independientemente de que podrían contratarse más conductores con la debida capacitación para prestar el servicio.

Arturo Loyola comentó que es distinto cuando se presta un servicio con unidades como los llamados moto taxis que carecen de seguridad, sin embargo, los vehículos particulares que han sido detectados en la zona del periférico se encuentran en buen estado y, la mayoría de quienes prestan el servicio, son personas que quedaron en el desempleo.

Insistió en que es la ciudadanía la que ha pedido que se preste el servicio pues lo consideran de calidad.

Van por el ajuste

Respecto a la tarifa del transporte, señaló que Puebla es uno de los dos estados del país con el menor costo para los usuarios, una vez que se han pasado seis años sin un ajuste a pesar de que los costos de las refacciones se duplicaron, además del precio del combustible.

Comentó  que corresponderá al gobernador actual analizar el tema para que en el último mes de su administración se implemente una nueva tarifa.

“Se está pidiendo 1 peso que a estas alturas realmente es una cosa mínima, con respecto a otros lugares, en ciudades similares a la nuestra el precio de la tarifa oscila en un promedio entre 8.50 y 9 pesos hay lugares en donde la tarifa es de 11 pesos, 12 pesos y en Puebla tiene seis años que cobran 6 pesos”.

Reconoció que no se pueden homologar con el metrobús una vez que el servicio es diferente, pero al menos hay que tener un respiro.

La inseguridad

Por otra parte el  representante de la Coordinadora Estatal de Transporte Público de Pasajeros y Mercantiles, Arturo Loyola, insistió en los problemas que enfrentan algunas líneas del transporte las cuales deben pagar cuotas que van de los mil a los mil 500 pesos al día para no ser asaltados en la ciudad de Puebla.

Reiteró que se entregó una propuesta al Congreso del Estado para que todas las unidades cuenten con el botón de pánico y localizados GPS.

Denunció que operadores del transporte público son obligados a pagar derecho de piso para evitar ser asaltados, situación que se ha detectado en seis rutas de circulación en la capital.

Dijo que esto ha puesto en alerta a los concesionarios, quienes han denunciado los hechos ante la Fiscalía General del Estado.

Aclaró que los casos se han registrado desde hace diez años e indicó que los hampones ya no solo se conforman con extorsionar a los operadores pues ahora los usuarios también son asaltados.

“Es algo que no se había contemplado y se venía denunciando años atrás, había ya en barrios, colonias de nuestra ciudad donde se había convertido en una práctica, donde cada unidad tenía que darles a los señores una determinada cantidad, estamos hablando de por lo menos 10 pesos por unidad, si una ruta tiene 50 unidades son 500 pesos y si lo sumas a dos turnos son mil pesos los que tenían que dar y que actualmente se sigue dando”, refirió.

Precisó que la situación se registra en San Manuel, la ruta de San Antonio, Xonaca, “se hace por muchos lugares, 10 pesos por unidad tienen que darle a cada uno de los señores y se hace por dos turnos tenían que darle entre mil y mil 500 pesos por ruta”.

Respaldó  las acciones de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) y de la Secretaría de Seguridad y Tránsito Municipal (SSPTM), instituciones que implementaron como estrategia subirse a los camiones para detectar a los asaltantes y detenerlos, sin embargo, consideró que hacen falta mayores acciones para prevenir el delito.

Loyola González señaló que ante esta situación algunos concesionarios en las rutas 6 y 45 “A” ya instalaron cámaras de video vigilancia en las unidades, acciones que continuarán para el siguiente año, pero advirtió que se requiere del apoyo de las autoridades para que el equipo esté conectado directamente a las instituciones de seguridad para que sea más fácil captar y detener a los hampones.

Refirió que es complicado que las bandas de asaltantes sean detenidas, ya que tienen sus propias estrategias para delinquir, por ejemplo, toman en cuenta horas, lugares y momentos en los que no existe vigilancia para actuar en contra de los operadores y los usuarios del transporte público.

En este tema sostuvo que el diputado presidente de la Comisión de Transporte, Julián Rendón Tapia y el titular de la Secretaría de Infraestructura y Transporte Público, Diego Corona ya tienen un documento en el que se pide que se invierta en botones de pánico y equipo de seguridad en las unidades para inhibir los asaltos.