El gobierno federal investigará a fondo el posible uso de avionetas antilluvia en la zona de Tehuacán, adelantó el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), por lo que se comprometió a dar un informe al respecto.
Así lo señaló durante su conferencia de prensa en la que fue cuestionado sobre las quejas de los campesinos.
El titular del Poder Ejecutivo Federal explicó que dará un informe sobre el bombardeo de nubes y el uso de aeronaves, al señalar que debe existir un control del espacio aéreo.
La semana pasada, el secretario de Gobernación, Javier Aquino Limón, con comité del Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado (Concytep), presentaron un informe sobre una investigación, en la que descartan la utilización de dichas aeronaves.
En el informe inicial, a grandes rasgos, se culpó al cambio climático la carencia de lluvias y no a las supuestas aeronaves que inhiban las precipitaciones pluviales.
Se presentó el reporte de 170 cuartillas, con 35 muestras totales para su análisis, como 18 muestras de agua, 17 de suelo y 10 de follaje de la zona, era poder detectar la presencia de sustancias ajenas.
De tal modo, Javier Aquino indicó que la falta de lluvia y escasez de agua en la región de Tehuacán no se debe a la intervención de químicos, sino al cambio climático, pues en menos de 10 años, se ha registrado una disminución en los niveles de lluvia.
“En esta zona sur del estado, de enero a septiembre de 2023 teníamos una media de 300 mililitros en la zona. Hubo años buenos, del 2011 al 2014, que llegaban a 700 mililitros,” informó Aquino Limón, quien dijo que el cambio climático es una “realidad irrebatible”, no parte de un discurso o una excusa.
Persisten denuncias
Sin embargo, a pesar de que la investigación la hicieron especialistas de diversas universidades, los productores no quedaron satisfechos con la respuesta, por lo que pidieron la intervención del gobierno federal.
Desde hace unos meses, campesinos han realizado bloqueos de carreteras, al acusar a las empresas de la zona de dispersar químicos en las tierras de cultivo para inhibir la lluvia, lo que dicen, ha afectado sus cultivos.
En la investigación, se buscaron anomalías en la composición del agua y del suelo que comprobaran el uso de químicos que inhibieran la lluvia y dañaran las cosechas, sin embargo, los resultados fueron los esperados.
De acuerdo con el estudio, sólo se encontró la presencia de tyrantón, una mezcla de alcohol y acetona, en una concentración promedio, por lo que no hubo pruebas de que se hayan vertido sustancias por vía aérea e incluso dichos químicos pueden encontrarse de manera natural en las plantas de la región.