Se realizó la edición 14 de La Marcha de las Putas, en la que se exigió justicia para las víctimas de feminicidio y ataques misóginos, con las consignas “Ni una Más” y “Vivas se las llevaron, vivas las queremos”.
Decenas de mujeres de Puebla, algunas acompañadas de sus hijos, salieron a las calles principales de la capital del estado, en la que participaron víctimas de desaparición, como la madre y seres queridos de Paulina Camargo Limón.
El punto de partida fue el reloj de El Gallito del Paseo Bravo, para marchar por avenida Reforma hasta el zócalo de Puebla, ataviadas de playeras negras y rosas y algunas disfrazadas de catrinas.
En el lugar emitieron un comunicado donde destacaron que en los últimos seis años se han registrado 341 feminicidios en Puebla en el sexenio pasado y 47 en el actual año, por lo que se colocaron las imágenes de las víctimas de muerte y desaparición.
Rocío Limón, madre de Paulina Camargo, joven de 19 años que fue reportada como desaparecida en 2015, con cuatro meses de embarazo.
Además, la marcha también incluyó la participación de trabajadoras sexuales, abogando por el reconocimiento de sus derechos laborales y la dignificación de su trabajo.
Las participantes abrieron un espacio para expresar sus vivencias y sentimientos a través de expresiones artísticas, como el canto.
De esta manera exigieron las participantes en un freno la persecución y discriminación contra las trabajadoras sexuales en la capital del estado de Puebla.
Con la exigencia de políticas públicas integrales para que cese el estigma, los prejuicios, la discriminación y persecución contra las trabajadoras sexuales, hicieron memoria de las asesinadas, quienes dijeron no han muerto y no serán olvidadas.
“Las seguimos nombrando, que hoy está aquí y las recibimos con un abrazo, pero son duda nos acompañan todos el año”, sostuvo una de las participantes.
En el zócalo de la ciudad, en el que colocaron cempasúchil, veladoras y los nombres de los 47 feminicidios que contabiliza el Observatorio de Violencia Social y de Género (OVSG) de la Ibero Puebla en el transcurso del año.
Se mencionó además los asesinatos de 33 mujeres trans registrados durante los últimos 11 años y recordaron la exigencia de tipificar este tipo de agresiones como transfeminicidios y no solo como crímenes de odio.
Participaron además familiares de Abigail Hay Urrutia, mujer asesinada en Salinas Cruz, Oaxaca, en la comandancia municipal, colgaron una lona con su foto y nombre.