Vaya escándalo el que desató con su columna Garganta Profunda el periodista Arturo Luna, respecto al despilfarro de 30 millones de pesos por concepto de renta de toldos y escenarios para los eventos organizados por el gobierno del estado en el marco de los primeros cien días.
Cito textualmente algunos fragmentos de esa reveladora columna.
“El embrollo de Escénica SA de CV
June 14th, 2011
Tema delicado, de hecho está en la agenda de riesgos de la Secretaría de Finanzas y la Contraloría del gobierno del estado de Puebla.
Entre otras cosas porque podría tratarse del primer gran embrollo de la nueva administración.
¿Por qué se le deben más de 30 millones de pesos a Escénica SA de CV?
¿Por qué misteriosas razones esta firma privada concentró la organización técnica de todos, absolutamente todos los eventos públicos —cortes de listón, arranque de obras, firmas de acuerdos o convenios, ruedas de prensa, etcétera— de los primeros cien días del morenovallismo?
¿Quién la contrató?
Y más importante: ¿por encargo de quién?
(…) La cosa se puso peor cuando Leal Islas y Tovilla Lara lograron confirmar lo que ya sospechaban.
Es decir, que todos, literalmente todos los servicios prestados por Escénica SA de CV presentaron sobrecostos, en algunos casos hasta del 300 por ciento respecto a los precios promedio en el mercado…
(…)¿Cómo es posible que se le deba tanto (30 millones) en tan poco tiempo a un solo proveedor?
¿Qué hay detrás de esta historia?
¿Quién trajo Escénica a Puebla?”

Hasta aquí la cita.
Atando cabos, la respuesta que dejó en el aire Luna Silva, tiene un solo nombre como respuesta.
El hombre que trajo a Puebla a Escénika, no es otro que Maximiliano (Max) Cortázar.
¿Y quién es el tal Max Cortazar?
Además de haber sido baterista de Timbiriche en sus años de juventud, este hombre fue el coordinador general de comunicación social de la presidencia de la República hasta julio de 2010.
También, fue uno de los asesores más cercanos al ahora gobernador Rafael Moreno Valle durante toda la campaña, y fue quien armó el equipo de comunicación social del gobierno del estado.
Así las cosas, no hay que darle vuelta.
El excesivo costo de más de 30 millones de pesos al que hace mención Arturo Luna, apunta claramente al primer cobro de factura del “súper asesor”.
Que nadie se diga sorprendido, más allá de quiénes hayan sido los funcionarios que aprobaron este robo en despoblado.
Todos, desde el gobernador, hasta el más modesto de los empleados de comunicación social, sabían quien estaba detrás de Escénika SA de CV.
Ahora o la beben o la derraman.
Y esta historia, apenas la punta del Iceberg.


Del malestar azul
Recibí un correo de un preocupado panista, en el cual nos presenta un retraro del escenario que hoy vive el PAN en el marco de la asamblea estatal de este partido. Veamos.
“Que tal Enrique, preferiría que mi nombre no se hiciera publico debido a que sigo inmerso en la actividad política.
Sin embargo tengo una preocupación, por lo que se lee todos los días en los periódicos y por el desarrollo de la asamblea estatal del partido para cambiar a su consejo estatal.
Empezare por contar acerca de mi trabajo como operador o delegado en el CDE de partido.
Nosotros operamos el proceso cuando el ahora gobernador empezó a conocer a la militancia del partido, hicimos hasta lo imposible para que se abrieran las puertas de todos los comités y estructuras municipales (aunque eso provocó fricciones hacia dentro del mismo partido); (…) para no hacer el cuento largo, hicimos todo lo humanamente posible para que este proyecto tuviera éxito, sin embargo al final fuimos tachados de “ladrones”.
Cuando la necesidad de recurso aumentó y los resultados eran inmejorables, simplemente alguno de los responsables de la operación, por supuesto, cercano al entonces senador Moreno Valle, considero que ya no le éramos útiles… simplemente optaron por hacernos aun lado.
Eso ahora ya es historia y en otro momento contare más detalles…
Lo que ahora me llama la atención es que veo amigos muy cercanos (Roberto Grajales, José Sánchez, Rocío Sánchez, Norberto Salas, Marco Viveros, Martha Fernández, Jesús Cortés, Cristóbal Ávila, Genaro Ramírez, panistas de mucho tiempo) haciendo lo mismo que “nosotros” hicimos hace un tiempo y veo que ellos terminarán igual que nosotros: hechos a un lado y tachados de ladrones."
Y efectivamente, los panistas fueron utilizados, y perdieron ganando.