Todo está prácticamente listo para que se publique la convocatoria correspondiente y se ponga a la venta el Sistema Operador de Agua Potable de Puebla (SOAPAP).
De encontrar comprador, el gobierno de Puebla se librará de la pesada carga que es este organismo, el cual arrastra adeudos por cerca de 3 mil millones de pesos heredados por anteriores administraciones y que representan un riesgo para las finanzas del estado. Lo que se discute actualmente entre los altos mandos del morenovallismo, es si el organismo, su cobranza, las plantas de tratamiento se venden en paquete junto con los pasivos o el gobierno del estado absorbe la deuda, lo cual elevaría mucho la deuda directa de la administración estatal.
La respuesta parece ser obvia, hay que buscar un comprador que quiera absorber los pasivos, pero quién en su sano juicio quiere comprar una empresa quebrada y con pasivos de alrededor de los 250 millones de dólares o 3 mil millones de pesos. Lo que es un hecho, es que el SOAPAP será puesto a la venta porque el gobierno del estado no quiere saber nada de esta “bomba de tiempo”, la cual puede estallar en cualquier momento y también compromete siempre la calificación de las finanzas de la administración estatal.
La disyuntiva es, reitero, el ver si alguien está interesado en adquirir a este organismo, el cual es atractivo en el tema de la cobranza y en el manejo de las plantas de tratamiento, lo cuales sí son un negocio redondo. Se busca finalmente que el SOAPAP esté en manos de capital privado y de esa forma sean los inversionistas los que se hagan cargo de todo lo que tiene que ver con el manejo del agua potable en Puebla, tema que, según el gobernador, es prioridad dentro de su agenda para los próximos años.
El problema del agua potable es real, los recursos cada día se agotan más y serán necesarias inversiones millonarias en los próximos años para garantizar el abasto del vital líquido para Puebla y su zona conurbada.

Es necesario rehabilitar plantas de tratamiento
Y hablando del tema del agua potable, bien haría la administración estatal poner en marcha de manera inmediata un programa de rehabilitación de plantas de tratamiento en Puebla.
En Puebla existen 222 plantas de tratamiento de aguas, las cuales en su mayoría operan en condiciones lamentables y no cumplen con las normas de sanidad que deben de prevalecer.
Hoy es necesario que las autoridades de cara a la sociedad den a conocer de qué forma operan las plantas de tratamiento de aguas que existen en la entidad y sobre todo si realmente cubren o no las expectativas para las cuales se construyeron.
Es Conagua el organismo que sabe perfectamente cómo operan las plantas de tratamiento de la entidad y ninguna cumple con las normas específicas, fijadas a nivel internacional para la operación de las plantas de tratamiento de aguas.
Es necesario que se ponga en marcha un programa para la rehabilitación de estas construcciones que no tienen mantenimiento desde hace muchos años.
Nada le cuesta al actual gobierno contratar tecnología de punta para tratar de rehabilitar las plantas de tratamiento de aguas, sobre todo porque hoy hay tecnología de punta para resolver esos problemas que resultan básicos.