Pa’ su mecha tengo heladas hasta las ideas. La culpa la tiene Peña Nieto, diría la vox populi… como si viviéramos en el siglo pasado, cuando ni las hojas de los árboles se movían si no lo ordenaban Echeverría o López Porpillo. En la actualidad el Mando Único está en los partidos políticos, ni siquiera en las cámaras. En fin, a ver que mazacote de país terminan haciendo los intocables dueños del poder, “ciervos de la nación”, jajaja.
El caso es que el frio es una especie de invento de los habitantes de Marte para exterminar a los viejos del planeta Tierra (no olvidemos que Marte está más lejos del sol). Con el frio los viejos se entumen y las tripas empiezan a perder ritmo, se quedan ateridos, como pajaritos inermes. Existe un arreglo, (según mis informantes) entre los marcianos y el Seguro Social. El Seguro no podrá prestar sus acuciosos servicios a las futuras generaciones porque está más tronado que una bailarina del extinto “Barba Azul”, así que si empezamos a desaparecer los mayores desde ahorita , podrán ahorrarse unas cuantas monedas para los años por venir.
Mira, lector querido: los marcianos le regalaron a José Antonio González Anaya, Director del Seguro Social, la forma para hacer los medicamentos más baratos, aunque no sirvan o te destruyan las entrañas al utilizarlos como el Seretide que es un medicamento para aliviar el asma y los bronquios. Esta madre es un invento infernal que tiene la virtud de que cuando lo aspiras te hace pomada la garganta, se siente como si te hubieras tragado a un macho vivo. Obviamente este ¿medicamento? no ha tenido que respirarlo Pepe Toño —al fin que aquí están sus bueyes, los que pronto desaparecerán de este Valle de lágrimas— y los marcianos podrán vivir felices en este planeta Tierra.
…el Seguro y los marcianos…
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