El domingo cuando ya los candidatos al gobierno de Puebla se hayan visto las caras en el Complejo Cultural Universitario de la BUAP, en el único debate convocado por el Instituto Nacional Electoral, sabremos quién de los tres es el que tiene las mejores capacidades para la ruta final del proceso extraordinario.

El librito dice que el primer lugar en las encuestas, Luis Miguel Barbosa Huerta, deberá cuidar lo acumulado a lo largo del último año, como candidato de la coalición Juntos Haremos Historia en la elección ordinaria de 2018 y en la que está en curso en este 2019.

En esa tesis deberá esperarse una participación moderada y sensata; sin prisas por entrar al callejón de las acusaciones que sus oponentes seguramente ya conservan entre sus pertrechos de guerra.

La esgrima declarativa sugiere aplomo y no impulsos innecesarios cuando ya se ha andado el camino más accidentado de la campaña, como cuando fue señalado de ser beneficiario de la tragedia del 24 de diciembre, con los decesos de Martha Erika Alonso Hidalgo y Rafael Moreno Valle, la pareja de panistas que se disponía a gobernar el territorio.

En el terreno del debate se podría dar por anticipado que los recursos más acabados para la discusión pública los porta Barbosa Huerta. De ello dio muestras a su paso por el Senado de la República, como coordinador de los senadores del Partido de la Revolución Democrática.

Acaso el escenario de mayor riesgo para el del candidato de Juntos Haremos Historia en el debate organizado por el árbitro extraordinario será la ausencia de la mano de doña María del Rosario (Charo) Orozco Caballero, su esposa. En el círculo cercano a Barbosa se sabe que la mano firma de la consorte es la que influye para el apaciguamiento del temperamento del abanderado. El atril será el único punto de apoyo.

Los adversarios del aliado de Andrés Manuel López Obrador, el Presidente de México, deberán atacar desde el principio, pues el formato ideado para este encuentro lo permite. Para ello fueron convocadas a un periodo de inducción Gabriela Warkentin, de W Radio y Patricia Estrada, de Puebla Comunicaciones, escogidas como moderadoras.

De la capacidad combativa de Enrique Cárdenas Sánchez, del Partido Acción Nacional, Revolución Democrática y Movimiento Ciudadano; y de Alberto Jiménez Merino, del Partido Revolucionario Institucional, dependerá la construcción de la percepción de sus seguidores y simpatizantes.

La contundencia del argumento, la rapidez para la contra réplica y la capacidad retórica para el contraste determinará el lugar que ocupen cada uno de los oponentes políticos con el paso del tiempo, en la historia. A quienes interesa la cosa pública conviene no perderlo de vista.

1.- El debate del domingo 19 será transmitido íntegro por las plataformas de Parabólica.MX e Intolerancia Diario, para lo cual ya se hicieron los ajustes técnicos necesarios.

2.- Al término de la transmisión especial del domingo, en esas mismas plataformas se tendrá un post debate con la participación de Juan José Rodríguez Pratts, por el Partido Acción Nacional; Xitlalic Ceja, Secretaria General del Partido Revolucionario Institucional; y Gabriel Biestro Medinilla, Presidente del Congreso y ex dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional.

3.- Quien conoce los tres perfiles de quienes participarán en ese encuentro, saben que sacará chispas. Se vale cruzar apuestas.