Como lo adelantamos en este espacio, José Félix Cerezo Vélez, será en próximo presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Puebla (CDH).

Pero su llegada no será fácil, ya que se avecinan una serie de amparos que buscarán derribar el proceso de selección.

Mónica Roldán Reyes, dirigente de la asociación “Comisión Ciudadana por la Democracia y los Derechos Humanos”, quien estaba entre los 25 registrados, ya interpuso su recurso de amparo ante la justicia federal.

Asimismo Lucio Ramírez, ya impugnó el proceso ante jueces federales y próximamente lo hará José Víctor Juárez Vázquez, quien fuera secretario técnico de la CDH y también de los despedidos por el ex presidente Adolfo López Badillo.

En tanto, Luis Soriano Peregrina, está estudiando la situación para ampararse, así como Mónica Silva, quien es la esposa del presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Héctor Sánchez Sánchez.

Mónica Silva, primero hará solicitudes de información del proceso vía transparencia.

El favorito

Félix Cerezo, siempre fue el favorito. Incluso desde la pasada entrega le mencionamos que era el predilecto para ocupar el cargo, sobre todo por estar rodeado por algunos morenovallistas y el clan del ex presidente de la CDH, Adolfo López Badillo.

“En los corrillos no solo del Congreso, sino del mismo gobierno estatal y hasta en el mundo de los derechos humanos, ven como favorito al número 1 de la lista (José Félix Cerezo Vélez)”.

“Por su actual cargo, experiencia en derechos humanos y vínculos con la 4T, es el favorito para llegar a la CDH”, adelantamos desde que salieron los seis finalistas.

El egresado de Derecho de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), hasta este miércoles era director general de la segunda visitaduría general Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), desde 2015.

Sin embargo, llega en medio de un proceso que polemizó al final y dividió opiniones.

Ahora tendrá un trabajo titánico por hacer.

Sobre todo porque encontrará una CDH por los suelos en credibilidad y en ruinas en trabajo a favor de los derechos humanos, tal y como la dejó la gestión del señor López.

Por lo tanto, ahora se espera una renovación total al organismo, el que ha vivido desde opacidad, bloqueo a quejas y hasta terrorismo laboral.

Quien ya tendrá que decir adiós es el actual presidente interino, Omar Siddhartha Martínez Báez.

Él fungió como su brazo derecho del señor López, tiempo en el que fue acusado de haber mandado a la congeladora decenas de quejas de violaciones de derechos humanos en el morenovallismo.

Increíblemente fue uno de los finalistas, pero ese ya es otro tema y ahora será historia.

Historial

El próximo ombudsman poblano, nacido en Tepeaca el 10 de julio de 1961, además de ser egresado de la UPAEP, se ha especializado más en la materia electoral, que en derechos humanos.

Sin embargo desde 2015, logró llegar a la segunda visitaduría de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

Justo hace cinco años, en noviembre de 2014, buscó ser titular de la Fiscalía Especializada en materia de Delitos Electorales, como consta en documentos entregados al Senado de la República, en poder de este columnista.

Llama la atención que en una de las misivas al Senado, el entonces aspirante a la Fiscalía, aclara que no ha sido condenado por delito doloso con sanción privativa de la libertad mayor de un año.

También en 2008, buscó ser consejero del entonces Instituto Federal Electoral (IFE), pero se quedó en una etapa final.

Ya como director de la segunda visitaduría de la CNDH, estuvo encargado de la investigación de la tragedia en Tlahuelilpan, Hidalgo, donde explotó un ducto de Pemex.

Incluso solicitó información a gobierno de Hidalgo.

Ahora estará al frente del organismo que ha dejado mucho que desear en Puebla desde hace más de ocho años.

Estaremos pendientes, tiempo al tiempo.