Puebla, al sur, limita con los estados de Guerrero y de Morelos, el primero irremediablemente vinculado con la siembra de la amapola y la marihuana, uno de los campos más importantes del país; mientras que Morelos, por décadas se ha convertido en hábitat para los cárteles de la droga, desde los Beltrán Leyva, hasta la Familia Michoacana, Los Rojos, el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y otros más.

Entre los municipios del Sur de Puebla se encuentra Jolalpan, que tiene unos 15 kilómetros de carretera donde se localizan los límites con Guerrero y Morelos y que en los últimos días ha dejado un saldo mortal de 7 fallecidos, entre estos, dos elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP).

La tarde del lunes 8 de febrero, en el municipio de Jolalpan se registró un enfrentamiento entre integrantes de un grupo de vecinos que se identifican como "Ronda Ciudadana" y presuntos integrantes del Cártel de Los Rojos, que dejó el saldo de tres muertos, dos del primer grupo y uno del segundo.

El martes 2 de marzo, fue ejecutado el empresario minero Zenón Barman Martínez, propietario de la mina de fierro denominada "Águila Real", que se ubica en el municipio de Jolalpan, por un grupo armado, al parecer porque se negó a darles "pago de piso".

Un día después del crimen cayó  "Lau Cazares", presunto jefe de plaza de la Familia Michoacana. En lo que se considera el "Triángulo", entre Río Frío, Texmelucan y Pachuca, fue detenido por elementos de la Policía Estatal, en el municipio de Izúcar de Matamoros, portando un rifle de asalto.

Lauro C. Domínguez, (a) "Lau Cazares", estaría implicado en el enfrentamiento a balazos ocurrido el pasado 9 de febrero en el municipio de Jolalpan, donde murieron dos integrantes de "La Ronda Ciudadana", también murió un integrante del grupo delictivo.

El miércoles 10 de marzo, en la carretera que va de la población de Teotlalco a Tlaucingo, al sur del Estado de Puebla, entre los límites de Puebla con Morelos, hombres armados emboscaron una patrulla de la Policía Estatal Preventiva (PEP), asesinando a sus dos ocupantes, para luego darse a la fuga con rumbo desconocido.

Un día después del atentado a los uniformados, la Fiscalía General del Estado (FGE), detuvo a seis presuntos integrantes del cártel de Los Rojos, que se hacían pasar como elementos de la Policía Municipal de Jolalpan.

Los sospechosos del doble homicidio habrían sido detenidos cuando portaban uniformes tácticos y distintivos de corporaciones, por lo que fue el primer delito por el que fueron acusados, que es usurpación de funciones y uso indebido de uniformes y condecoraciones.

Se trata de Miguel “N”, Javier “N”, Rafael “N”, José Yovani “N”, Sebastián “N” y Misael “N”, quienes el domingo 14 de marzo, fueron vinculados a proceso, por un Juez de Control, por los delitos antes mencionados, aunque no se ha dicho cuál fue su participación en la muerte del oficial Pedro Sánchez Lima, además de su escolta Oscar Norberto Rios, ocurrido a las 15 horas del miércoles 10 de marzo.

Pero toda esta jornada de violencia tiene que ver con que en este municipio, Jolalpan, se encuentran 15 kilómetros que necesariamente se tienen que recorrer de Guerrero a Puebla, o viceversa, para el trasiego de las drogas, principalmente la marihuana, de la que por semana pasan al menos unas 10 toneladas, además de cocaína, por los laboratorios que existen en Guerrero y que están ubicados en esas zonas.

Esa es la realidad, la lucha por el pase de las drogas, de robo de vehículos, de contrabando, de todo lo que el lector se pueda imaginar.

Nos vemos cuando nos veamos