Lo que parece letra de un mal corrido de grupos de tambora es cierto, el viernes 20 de mayo, en el interior del restaurante el Parrillaje, de la 43 Poniente y 5 Norte, elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), aprehendieron a José Luis R., T., mejor conocido como “El Téllez”, por el delito de fraude.

Se trató de una orden de reaprehensión, dictada, en el viejo sistema, por el Juez Quinto de lo Penal del proceso 523/2014. que tiene que ver con una estafa en agravio de internos del Cereso de San Miguel, quienes le pagaron dinero para que los sacara de la cárcel; sin embargo, no hizo nada y se embolsó el efectivo.

Para que le dieran el dinero el litigante, que se ufana de ser “doctor”, presumió a sus clientes su relación con altas autoridades del Gobierno de Puebla, además de la Fiscalía General del Estado (FGE), y del Poder Judicial, para luego dejarlos al abandono.

Ya antes el caso había sido denunciado y el abogado había sido detenido, pero obtuvo su libertad mediante el pago de una fianza, además que llegó al acuerdo de regresar lo defraudado, pero nada que cumplió y lo volvieron a reaprender, justo cuando corría otra de sus parrandas.

Desde su despacho, el cual se ubica sobre la Avenida San Francisco y 22 Sur, de la colonia San Manuel, selecciona quienes van a ser sus víctimas, utilizando el Facebook y el WhatsApp, donde le llega información de detenidos o denunciados, para ofrecerle sus servicios.

Otra forma de operar del abogado detenido es mediante información confidencial que empleados extraños de manera ilícita para ofrecerlas ve esta forma cobrar porcentajes y el costo del litigio, aunque en muchas ocasiones también a estos los engaña y no les da nada.

El abogado tranza al momento de ser detenido dijo a sus captores que “no se la iban a acabar, que iba a salir de inmediato y que los buscaría para cobrarse la afrenta y darle cumplimiento a la ley”.

Para fortuna de los ministeriales que lo aprehendieron, en el momento de asegurarlo no venía acompañado de sus guardias, que son los narcomenudistas de la mafia de Analco o los saca borrachos de algunos bares a quienes les paga 500 pesos diarios para que lo acompañen en sus parrandas, donde golpea, priva de su libertad a mujeres a quienes y las despoja de sus valores.

Es toda una fichita con disfraz de abogado.

Nos vemos cuando nos veamos