Quiubo, banda intolerante. Como ya se la saben, aquí les viene su héroe de barrio que les trae la información más certera del pancracio político de Puebla
Así que agárrense, porque me les vengo. Y conste que no les aviso dos veces.
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No que no tronabas pistolita, así les deberá estar sonando la cabezota a los flamantes dipus de Puebla, luego que siempre sí van a tener que chambear tiempos extras.
Y es que cuando ya sentían que habían librado la Ley de Desaparecidos, pos resulta que no corrieron con tanta suerte porque ya no podrán pasarse el tema por el glorioso arco del triunfo y ahora la van a tener que aprobar sí o sí.
Porque ni más ni menos el viernes pasado llegó al Congreso la iniciativa del góber de la susodicha ley.
Pero eso sí, los poblanos vamos a tener que esperar que los mirreyes diputados que tenemos regresen de su merecido descanso.
Ellos de huevones y uno persiguiendo la chuleta sin pararle.
Y es de que pa’ nuestros legisladores, primero es el jolgorio y luego las obligaciones.
Así que veremos a María del Carmen Cabrera Camacho, Chavelita pa’ los cuates, hacer que trabaja en la mentada Comisión Permanente y llamar a los demás vaquetones.
No se espanten mis carnales si en una de esas vemos a más de un dipu en pleno Congreso con el bronceado a todo lo que da y echando rostro de vacación el 16 de agosto.
Y ahora sí van a tener que correr pa’ sacarla porque tendrán un mes antes de bajar la cortina.
Por si fuera poco, Chavelita Cabrera va a tener que apechugar en sus adentros porque en una de esas hasta toman en cuenta al colectivo “La Voz de los Desaparecidos”, casi, casi, su némesis.
¿Qué necesidad había de nomás aplazar lo inevitable? Cada cabecita es un mundo y más si se trata de nuestros brillantes legisladores.
Conste que acá andaremos pa’ seguir contándoles cómo los dipus se tuvieron que tragar la soberbia y poner sus santas manitas a trabajar.
Mientras, banda, cuídense del Covidio y no le jueguen al valiente o voy y les parto su mandarina en gajos.
¡Ahí la vemos!
