Finalmente regresó el presidente municipal de Tecamachalco, Ignacio Mier Bañuelos, a su terruño o al menos eso aparentó.
Se dice que lo hizo con un amparo bajo el brazo, por eso de las cochinas dudas y con el papelito evitar ser detenido por lo que vayan a salpicar las investigaciones del asesinato de los tres policías ministeriales a manos de sus elementos, la semana pasada.
Y es que el edil sí estuvo desaparecido unos días, por andar arreglando estos asuntos en la Ciudad de México, tanto jurídicamente, como políticamente.
Claro, de la mano de su padre, el coordinador de diputados de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco.
Por eso mismo, ya hubo la confianza de reunirse el pasado martes con la secretaria de Gobernación estatal, Ana Lucia Hill.
Ahora, ya se sabe que el edil no solicitará licencia, aunque eso hubiera sido lo más sano.
Pero con su equipo de defensa analizaron cómo esto podría dañar no solo su administración, sino la del futuro de su padre, quien piensa en grande y sueña con ser gobernador de Puebla y prefirieron aguantar hasta dónde más estire la liga.
Lo cierto es que este tema aún no está finiquitado y dará mucha más tela de donde cortar.
Claro, si es que no se llegan a acuerdos políticos, ya que todo parece indicar ya está en ese terreno.
Tiempo al tiempo.
El escondido
Recientemente el Instituto Nacional de Acceso a la Información (INAI), organizó las mesas de co-creación del módulo de justicia abierta, como parte de los trabajos de la Tercera Edición de la Métrica de Gobierno Abierto.
A la reunión virtual asistió Javier Trejo, actual jurídico consultivo del Instituto de Acceso a la Información de Puebla (Itaipue).
Llama la atención que esta persona esté ocupando un buen cargo en el organismo garante de la transparencia, sobre todo por su pasado morenovallista.
Incluso fue uno de los que más atacó al actual gobernador Miguel Barbosa Huerta, cuando la guerra estaba en su apogeo.
Javier Trejo, fue representante de Compromiso Por Puebla ante el Instituto Electoral del Estado (IEE), en 2018.
En su momento presentó la solicitud de iniciar un procedimiento especial sancionador en contra de Morena por la presunta compra de votos en la capital del estado.
Luego de que diera la vuelta la rueda de la fortuna, tuvo efectivamente fortuna y fue rescatado por la entonces presidenta del Itaipue, Marcela Carcaño.
Por eso ya no llama tanto la atención que ahora ocupe ese cargo, en el cual trató de pasar con muy bajo perfil.
No vaya a ser que lo vean, el chiste es seguir viviendo del presupuesto.