Al Congreso del estado llegó un nuevo tema que generará muchas opiniones encontradas: el derecho de las personas con enfermedades terminales a rehusarse a tomar tratamientos médicos en lo que se puede considerar una eutanasia no aplicada sino de omisión médica.
El exhorto del diputado del PT José Miguel Huerta Rodríguez para debatir el tema subraya la importancia de que cada uno de nosotros decida, en el pleno uso de sus facultades, si quiere someterse a operaciones, tratamientos o procedimientos médicos o no, cuando se confirme que padece alguna enfermedad para la que aún no exista cura.
Al hablar de enfermedades crónico-degenerativas, la mayoría podríamos pensar en los diferentes tipos de cáncer, aunque también deberíamos incluir algunas afecciones mucho más comunes, que igualmente carecen de curas, como la diabetes, esclerosis o hasta la hipertensión.
¿Se debe respetar la decisión de un joven que acaba de ser diagnosticado con alguna de estas enfermedades, de no tomar medicamento ni acatar las indicaciones de sus doctores?
¿Cómo evitaremos que lunáticos en los puestos clave de la administración pública decidan que sus filias y fobias son más importantes que la vida de los mexicanos y no se escuden en esta ley para continuar con sus famosos recortes que más suenan a austericidios?
Con base en esto, se podría inducir la no aplicación de hemodiálisis que resultan de un alto costo para el estado, por citar un ejemplo.
¿Habrá una edad establecida para poder tomar esta decisión; y cuál sería la indicada?
Será complicado, de inicio porque los mexicanos que tanto nos burlamos de la muerte, no tenemos la cultura de la prevención y difícilmente la sociedad entenderá que el derecho al bien morir, debería estar tutelado.
Debo decir que en lo particular, en casos de enfermedades terminales estoy a favor de que se legisle y se le dé esa facultad a quien no quiere seguir sufriendo un dolor que alcanza niveles inhumanos, pero detrás de esta ley existen muchos factores como los religiosos, los políticos y los ligados a la corrupción que debe ser motivo de análisis de altura y no a vulgares debates como los que abundan en la máxima tribuna del estado.
Para esta discusión, valdría la pena un Parlamento Abierto donde especialistas señalen los pros y contras de la medida, sin embargo, considero que antes de incursionar en esta ardua tarea, las y los legisladores deberían resolver temas como la legalización de la interrupción del embarazo, ¿O acaso nadarán de a muertito como los diputados anteriores?
Es pregunta a la que le urge una respuesta.
Destrozando La Noticia vuelve a full
Tras un receso de fin de año, esta noche estrenamos la nueva temporada de Destrozando la Noticia con el retorno de Lety Torres en el horario acostumbrado de las ocho de la noche.
Con las pilas recargadas y tras tres años de ausencia, Lety regresa a su casa y será la primera de muchas novedades con las que fortaleceremos una barra programática de siete a diez de la noche, con el lanzamiento del primer canal de televisión digital en Puebla: TVin.
Hoy también regresa el segmento informativo de mi admirado Fernando Maldonado con su Parabólica a las siete de la noche e inmediatamente después volvemos con DLN.
Y todo por la plataforma y aplicaciones de Intolerancia Diario.
Ahí nos vemos.