Aunque oficialmente no se ha concretado una alianza entre Acción Nacional y Movimiento Ciudadano las encuestadoras comienzan a medir qué tan rentable sería para estas dos fuerzas políticas.  

A nivel nacional, lo habíamos señalado, es sumamente fructífero este acuerdo porque MC tiene en Colosio Jr. a un presidenciable, justo lo que le falta al PAN. A su vez Acción Nacional tiene figuras para cubrir los espacios que Movimiento Ciudadano no podría colocar en 2024.  

Y a nivel local el escenario es similar.

Si se alían azules y naranjas tendrían en las figuras de Eduardo Rivera y Fernando Morales dos piezas clave. Rivera Pérez podría contar con el apoyo de MC en el interior del estado, que es el punto flaco del edil, mientras que el diputado emecista tendría la fuerza para ser propuesto como legislador federal, específicamente como candidato al Senado.

En este hipotético escenario, como dice la pirinola, todos ganan, porque el PAN se fortalece donde hoy requiere apoyo y a su vez, MC contaría con una infraestructura en la zona conurbada que le hace falta.

Aún faltan varios meses para las definiciones, sin embargo, los resultados que arrojen las encuestadoras darán luz a los presidentes estatales y nacionales de ambos partidos para comenzar a ponerle precio a sus canicas.  

La duda es si esta nueva alianza pragmática, que no ideológica, podrá sacar de Palacio Nacional a Morena y más allá, si alcanzará para frenar el tsunami de López Obrador, quien ya se vio, está empecinado en mantener el poder, al precio que sea, incluso eliminando al INE.

Pago de favores… a medias

Tras las amenazas de Morena y el entreguismo de Alejandro “Alito” Moreno este martes en la Cámara de Diputados sucedieron dos eventos que reafirman la idea del acuerdo entre AMLO y el presidente del PRI.  

En primer lugar la Comisión de Gobernación, que preside el priísta, volvió a sesionar y casi por arte de magia ningún morenista recordó que hace unos días lo habían defenestrado -no oficialmente- de tan importante Comisión.  

Pero el regreso de “su presidencia”, que bien podría ser parte del pago de favores luego que el PRI propuso y votó a favor de la militarización del país, no llegó en bandeja de plata.

Como era previsible y tal cual señalamos en este espacio, la extorsión a Alito continuará -al menos- durante todo el sexenio.  

Ayer mismo, el último día, se instaló en la Cámara de Diputados la Sección Instructora, la cual resolverá la solicitud de desafuero de Alito.  

Y así la investigación por enriquecimiento ilícito que reposa sobre el escritorio de “urgente” en la Fiscalía de Campeche, contra Moreno Cárdenas, continuará siendo la bota sobre el cuello del priísta.  

Y por si fuera poco, ante el dicho, nada creíble del priísta sobre que no dará su voto a la Reforma Electoral que propone López Obrador, la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, advirtió que tiene nuevos audios que involucran al hermano de Alito.  

Como se ve, al priísta lo traerán bien agarrado y bailando al son que le toquen, ya le encontraron la medida.