El arranque de Pepe Chedraui es esperanzador. El nuevo alcalde ha resumido en cinco puntos las peticiones y necesidades más urgentes e importantes para el desarrollo de Puebla capital.
Para atender la compleja ciudad que ha heredado, Pepe apostó por: seguridad pública, desarrollo económico, bienestar para todos, obras y servicios, y gobierno moderno.
Así resumió su compromiso por reforzar la vigilancia en las calles con patrullas que cuentan, desde ayer, con un nuevo rostro y que, en breve, algunas de ellas serán eléctricas. La respuesta inmediata ante la petición de auxilio, fue parte de su palabra empeñada.
El bacheo, tan urgente y solicitado, también se atiende con un programa que se suma al Bacheo Nocturno, que desde hace una semana puso en marcha el gobierno del estado, ante el abandono de los alcaldes salientes.
La atracción de al menos 25 eventos nacionales e internacionales, que lo mismo generarán una derrama económica importante, que promoverán a Puebla capital como destino turístico, fue otro de los anuncios.
Chedraui habló también de la importancia de trabajar en unidad, no sólo con su Cabildo o sus homólogos del área metropolitana, si no también con el gobernador Sergio Salomón, con Alejandro Armenta -cuando asuma el cargo- y con la federación.
Hacer de la Angelópolis, la mejor ciudad de México no será fácil, pero, si el trabajo de las nuevas autoridades, como promete el slogan es “imparable”, habremos de avanzar mucho.
Por el bien de Puebla, que así sea.
Los muertos del Palacio
En breve, de los cajones del Charles Hall comenzarán a salir muertos y no precisamente por que se avecina noviembre. Las deudas a proveedores, el escándalo de los estados financieros y hasta quejas y denuncias que nunca procedieron, comenzarán a brotar.
A la par de los retos de gobernar una ciudad tan compleja como lo es Puebla capital, el alcalde Pepe Chedraui habrá de comenzar una revisión exhaustiva sobre todo ese polvo que se escondió debajo de los tapetes, durante la transición municipal.
Y digo que deberá hacerlo porque de lo contrario, las complicaciones o implicaciones legales que se desprendan de las acciones u omisiones del gobierno que acaba de concluir, pasarán a ser parte de sus pasivos.
¿Qué tanto encontrará el nuevo equipo en los rincones del Palacio Municipal?
Veremos y diremos.
Nuevas caras, antiguos problemas
La renovación de los presidentes municipales trae consigo retos. Si bien cada región tiene sus peculiaridades, en términos generales podemos adelantar que los baches y la seguridad, son los dos temas que pondrán a correr a las autoridades entrantes.
Esperemos que los meses que tuvieron para realizar la transición hayan sido suficientes para evitar las famosas curvas de aprendizaje, que casi siempre terminan acortando los tres años de gobierno.