En entrevista con la representante de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Jakqueline Ordóñez Brasdefer, sobre el caso de Marlene Alonso Meneses, donde a causa de acusaciones de violencia de género por integrantes del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales (IAIP), se logró que el instituto, a través de sus consejeros, ofrecieran una disculpa pública, explicó que se actuó a razón de la queja recibida.
Esto tras ser cuestionada sobre un posible conflicto de intereses debido a una relación laboral entre la afectada y la presidenta de la CEDH, aseveró que dicha recomendación fue a favor de una mujer cuyos derechos se habían vulnerado.
Aclaró que Marlene Alonso, en su momento, inició diversos procedimientos incluyendo cuestiones administrativas, entre ellas, la queja ante la CEDH, por lo que la comisión hizo la recomendación al IAIP Tlaxcala como un organismo público con la obligación de salvaguardar los derechos humanos de todas las personas, además indicó que si un servidor público incurre en una violación de los derechos de las personas, debe ser investigado y sancionado, según sea el caso.
También aclaró que dicha recomendación no fue por destitución laboral, sino por violencia de género, pues la CEDH no tiene la facultad de revisar asuntos laborales.
Jakqueline Ordóñez Brasdefer puntualizó que en su momento fue compañera de trabajo con la solicitante, y se dijo honrada de compartir experiencias laborales con ella y otras personas, sin embargo, en el ámbito personal dijo no tener una relación con Marlene Alonso Meneses.